Como cuenta el New York Times, la recuperación de beneficios de los bancos de inversión está haciendo que los especuladores se crezcan de una manera desorbitada.
El último ha sido el banco de inversión Goldman Sachs, dado que su presidente, Lloyd C. Bankflein, anunció ayer que su banco ha obtenido unos grandes beneficios durante el presente ejercicio.
Además, tras glosar su bonanza mostró la euforia existente en el seno de la compañía. Es más, asegura que Goldman nunca estuvo en peligro, dado que su banco era demasiado potente y estable como para hundirse. Si aceptó ayudas, fue para no falsear la competencia.
Esto supone una nueva bofetada de Wall Street al presidente norteamericano Barack Hussein Obama, dado que, una vez más, los grandes de la banca de inversión, causantes de la crisis financiera de 2007 -que aún arrastra la economía real- no sólo se muestran ingratos hacia el esfuerzo de los contribuyentes estadounidenses sino que, encima, retan abiertamente al Estado, vuelven a subirse los sueldos y, en resumen, vuelven a las andadas. Por supuesto, no existe arrepentimiento alguno de Wall Street de haber provocado la mayor crisis financiera de la historia como sugería Obama.
También cabe recordar que, históricamente, la entidad Goldman Sachs ha estado representada en España por el consejero del Santander y ex secretario de Estado con los socialistas, Guillermo de la Dehesa, quien, a pesar de dejar claro siempre su indudable progresismo, es conocido por los periodistas económicos españoles como Guillermo de la Derecha.
Gabriel López
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