XXI Asamblea General del Sínodo de Obispos, que se celebra en Roma, El nuevo prefecto de la Sagrada Congregación para la Doctrina de la Fe, el norteamericano William J. Levada, ha dicho que quien vota a políticos que defienden el aborto está cometiendo un pecado.
Ahora, ¿qué hacemos los españoles? No podemos votar al Partido Popular. Tampoco al PSOE ni a Izquierda Unida, ni a CiU, ni a ERC, ni al PNV, ni a EA, ni al Partido Comunista de las Tierras Vascas, ni a la Chunta Aragonesista. Para ser exactos, no podemos votar ni a uno solo de los partidos políticos parlamentarios. Desde luego, tampoco al PP, introductor en España de la píldora abortiva y de la píldora del Día Después. El aznarismo, no sólo no hizo nada para evitar que España se convirtiera en un paraíso del aborto, sino que silenció todos sus recursos legales (por ejemplo el presentado en la oposición ante el Tribunal Constitucional) contra las leyes abortistas. Habrá que buscar nuestros objetivos de voto en fuerzas extraparlamentarias.
Eulogio López