- Estará formada por la UE, el BCE y el FMI aunque este último "no como cofinanciador"
- El dinero que recibirá la banca española sale de "préstamos que hacen los estados miembros de la UE", "gracias al apoyo de los contribuyentes"
- Y "quien da dinero, nunca lo da gratis", afirma el vicepresidente de la CE
- Es decir, "ese préstamo lleva aparejadas unas condiciones y unos compromisos"
- "Lo que va a hacer la CE es negociar hasta el último detalle cada uno de los planes de reestructuración de las entidades financieras que reciben apoyo público", ha explicado
- Se trata de "un instrumento financiero de los estados miembros creado para atender necesidades de recapitalización u otro tipo de apoyo al sistema bancario
- Destaca que, para el caso español "ha sido la primera vez" que se crea un instrumento financiero como este "para atender necesidades de recapitalización u otro tipo de apoyo al sistema bancario"
- También explica que los intereses del crédito a la banca española computarán como déficit de España, aunque el préstamo "no computa como déficit y sí como deuda"
- Aunque luego, Amadeu Altafaj ha dicho que los intereses no computarán como déficit
- Amadeu Altafaj (CE) ve "razonable"que la ayuda a la banca tenga un interés entre el 3% y 4%
- Explica que el Estado español será el responsable en último término de la devolución del crédito, ya que es el que firmará el memorándum
- Da la razón al Gobierno español en cuanto a que no es un rescate al país: "La ayuda se ciñe al sector financiero", "creo que hay una distinción clara"
- Altafaj destaca la gran "solidaridad" de la UE
- Casimiro García Abadillo (tertuliano Onda Cero): "Holanda, Austria y Finlandia fueron países muy duros, no estaban dispuestos a ceder"
En la SER, el vicepresidente de la Comisión Europea, Joaquín Almunia, se ha referido a si los intereses del crédito a la banca española computan como déficit de España: "Los intereses sí, porque es un gasto. Pagar los intereses del préstamo es un gasto que está en el capítulo correspondiente de los presupuestos. Lo que es el préstamo no computa como déficit y sí computa como deuda".
Preguntado por las declaraciones del ministro de economía alemán, Schauble, que ha dicho que habrá una troika formada por la UE, el BCE y el FMI que controlarán la reestructuración de la banca en España, Almunia ha dicho: "Eso es así". "El FMI no financia –en el caso español, por no estar autorizado según sus estatutos, al ser un programa sectorial, o sea, sólo para el sistema financiero- pero se dice en el comunicado del Eurogrupo que el FMI está asociado, dada su experiencia, a las tareas de seguimiento de todo lo que vaya a suceder a partir de ahora en la utilización de ese dinero. Y en lo que se ha dado en llamar la troika, también estará el FMI, aunque no como cofinanciador".
Y ha añadido: "Quien da dinero, nunca lo da gratis. Aparte del tipo de interés que se cobre, siempre pone condiciones y quiere saber qué se hace con su dinero y hay que entender que eso es lógico". Sobre los controladores que vigilarán a España, ha afirmado: "Espero que actúen bien, de forma honesta, que no se crean que vienen a un país bananero. España es un país muy importante en Europa, en la zona euro".
Tras explicar que el dinero que recibirá la banca española sale de "préstamos que hacen los estados miembros de la UE", ha añadido que "lo que va a hacer la CE es negociar hasta el último detalle cada uno de los planes de reestructuración de las entidades financieras que reciben apoyo público". Es decir, "cada una de esas entidades financieras va a tener que presentar un plan de reestructuración, y ahí se va a ver con el máximo detalle cómo se reparten los esfuerzos, cuáles son los compromisos de esa entidad, cuál es el modelo de negocio de esa entidad, y de qué manera esa entidad -gracias al apoyo de los ciudadanos, de los contribuyentes- es capaz de ponerse otra vez a cumplir sin incertidumbres ni mayores problemas sus obligaciones, que es financiar a empresas y a familias".
Almunia ha recordado que el préstamo al FROB es "hasta un máximo de cien mil millones y prácticamente todo el mundo que ha estado observando el sistema bancario español sabe que esa es una cifra máxima". Y ha señalado que esta facilidad -a cambio de compromisos- "le puede dar el dinero al FROB en condiciones más favorables".
El vicepresidente de la Comisión Europea no ha querido pronunciarse sobre si es un rescate o no pero lo ha definido así: "Estamos hablando de un instrumento de los estados miembros y en particular de la zona euro, que está en condiciones de prestar dinero, o bien directamente al Tesoro de cada país o bien -en el caso de España, que ha sido la primera vez- a un instrumento financiero creado para atender necesidades de recapitalización u otro tipo de apoyo al sistema bancario. Y ese préstamo lleva aparejadas unas condiciones y unos compromisos".
Y ha añadido: "Es difícil ser optimista cuando lo que se acaba de reconocer es que por sí solo, el instrumento financiero con el que cuenta España para atender al sistema financiero tiene difícil financiarse en condiciones razonables en el mercado". "Pero sí es verdad que si se recapitalizan los bancos, si se les permite con ello fortalecer sus balances y alejar el riesgo de una insolvencia, van a estar antes en condiciones de cumplir con su obligación, que es dar crédito a la economía real".
Preguntado si sin Bankia hubiera sido necesario el rescate a la banca, ha respondido: "No lo sé. Bankia ha ido y es muy importante -ahí están los 23.000 millones como argumento", "pero es verdad que incluso antes de Bankia ya la situación de los mercados financieros, de la zona euro, y en particular de algunas economías de la zona euro era muy delicada. No hacía falta Bankia para darnos cuenta de que la situación era muy delicada y para saber que, en función de lo que pase el próximo domingo en Grecia, puede haber un shock muy fuerte en la zona euro o pueden empezar a verse luces de esperanza en el horizonte de la zona euro". Aunque, "ahora empieza a haber un cambio de tendencia que esperemos que se confirme primero en Grecia, donde haya una mayoría parlamentaria que apoye seguir en el marco de relación con sus socios que inició el Gobierno de Lukas Papademos y a partir de ahí esperemos que el sistema bancario español empiece a reestructurarse y fortalecerse de nuevo".
Preguntado por qué papel ha jugado el presidente de EEUU, Obama, en la decisión, ha señalado: "EEUU y Obama son plenamente conscientes de que si la zona euro sale adelante, la economía norteamericana se va a beneficiar de ello y viceversa". "Y eso le preocupa al presidente (Obama) porque piensa en los intereses de los ciudadanos norteamericanos y por supuesto le preocupa a meses de unas elecciones extraordinariamente importantes". "La crisis que tenemos en Europa vino de EEUU y ahora EEUU teme que las crisis de las economías de la zona euro repercutan allí".
Acerca de si ha quedado algo de la expresión 'la refundación del capitalismo', ha indicado: "Siempre pensé que aquella expresión era una frase hueca". "Esta crisis a donde nos debe llevar es a organizar un sistema financiero regulado, supervisado, controlado, para que no cometa los excesos que se han cometido y que nos han llevado a esta crisis. Y ese sistema financiero es global y nos tiene que llevar a adoptar decisiones en el ámbito europeo mucho más claras y contundentes que en el pasado, incluso en el ámbito global. Y es un sistema financiero que tiene que orientar sus financiaciones en la medida de los posible en desarrollos de sectores económicos y actividades económicas que beneficien a los ciudadanos y que no beneficien a unos pocos". "Esta crisis pone en la mesa de los políticos una reflexión muy sera sobre la imposibilidad de seguir aceptando desigualdades y privilegios como los que han crecido al calor de la euforia financiera".
Almunia ha destacado que parece que los mercados "están reaccionando de manera positiva, lo cual me parece estupendo, porque si después de una decisión como la que se ha tomado el fin de semana los mercados no la entienden, hemos hecho un pan como unas tortas". "Confío en que los mercados van a recibir esto como un alivio y que van a reducir tensiones y eso va a hacer mucho más fácil todo".
Amadeu Altafaj (CE) da la razón al Gobierno español en cuanto a que no es un rescate al país: "La ayuda se ciñe al sector financiero", "creo que hay una distinción clara"
En TVE, el portavoz de Asuntos Económicos y Monetarios de la Comisión Europea, Amadeu Altafaj, ha respondido a la pregunta de si él considera la reestructuración del sistema financiero español con cien mil millones como un rescate a España, tal y como niega el Gobierno español: "Yo lo entiendo. Porque no estamos en el caso de Grecia, (Irlanda) y Portugal. Por lo tanto, es importante marcar una distinción clara. Esto quiere decir, fundamentalmente, que se considera en Europa que España está acometiendo de forma correcta los retos en términos de sanear las cuentas públicas y de hacer reformas económicas para sostener el crecimiento y el empleo. Y la ayuda se ciñe al sector financiero". "Sin entrar en el debate semántico, creo que hay una distinción clara".
Altafaj ha confirmado que aunque las ayudas se canalicen a través del FROB, en última instancia, el que responde es el Estado. Según el portavoz, los intereses del préstamo no contabilizarán como déficit, porque ha aclarado que en "términos de contabilidad europea a este tipo de ayudas se les concede un tratamiento distinto", aunque sí aumentará la deuda. Luego ha matizado: "Cuando se establezca el plan de reestructuración y cómo van a ser canalizadas las ayudas a través del FROB, la agencia europea de estadística Eurostat establecerá con claridad estos criterios". "Pero pensemos que en ayudas de este tipo a otros países que han acometido rescates ha habido una separación y por lo tanto un tratamiento estadístico específico". "No me puedo pronunciar ahora definitivamente cuando todavía no conocemos el plan de reestructuración".
Y ha añadido que "no habrá más que las condiciones que se aplique en el sector financiero, pero estos préstamos se conceden a países que cumplen con un determinado orden en sus cuentas públicas y cumplían con los objetivos de déficit", al tiempo que recordaba que España "es uno de los países que menos recaudan en términos de IVA". Ha subrayado que serán "condiciones muy rigurosas que se ceñirán a todo el sector financiero, no sólo a los bancos afectados", y ha añadido que el Estado español será el responsable en último término de la devolución del crédito, ya que es el que firmará el memorándum.
No obstante, ha señalado que el crédito "en condiciones muy favorables para la economía española" debe hacer que las entidades con problemas de solvencia se fortalezcan, y el dinero pueda devolverse a través de mecanismos de mercado, como fusiones o adquisiciones. "Si no, evidentemente el Estado español es efectivamente el garante y los fondos públicos serían los que deben ayudar a la recapitalización, pero no se trata de salvar bancos a cualquier precio, y por supuesto no a banqueros ni a accionistas".
Preguntando sobre si los "hombres de negro", "la troika (BCE, CE y FMI) controlarán la reestructuración bancaria, Altafaj ha afirmado que "los llamados hombres de negro quieren preservar modelo económico y social de Europa y están del lado de España", y que "habrá visitas de funcionarios de la Comisión Europea y Banco Central Europeo" porque es "normal que quienes otorgan la ayuda, quieran pruebas de su buena utilización". El portavoz también ha valorado positivamente la participación del FMI en los controles "que aunque no participa directamente en el crédito, porque es otro programa, forma parte del esfuerzo de seguimiento".
Altafaj no ha querido dar detalles concretos sobre a qué tipo de interés se realizará el préstamo por considerarlo prematuro, aunque estima "razonable que oscile entre un 3% y un 4%", serán en todo caso "mucho más interesantes que los que encuentra España en el mercado". Altafaj, tampoco ha querido desvelar los plazos de vencimiento, y ha asegurado "que estos detalles se pactarán en las próximas semanas".
Altafaj ha destacado la gran "solidaridad" de Europa al articular esa ayuda al sistema financiero español y, antes, por el rescate a Irlanda Grecia y Portugal.
Casimiro García Abadillo (tertuliano Onda Cero): "Holanda, Austria y Finlandia fueron países muy duros, no estaban dispuestos a ceder"
En Onda Cero, el periodista Casimiro García Abadillo explicaba su información de hoy en El Mundo en la que cuenta las negociaciones entre De Guindos y la UE para rescatar al sistema financiero español. Rajoy le envió a Guindos un SMS en el que le dijo: "Aguanta, España no es Uganda". Luego De Guindos les dijo: "Si ustedes quieren forzar el rescate de España, vayan preparando 500.000 millones de euros y otros 700.000 para Italia, que tendrá que ser rescatada después de nosotros". Lo contaba así Casimiro García Abadillo: "Eso fue un órdago que provocó, de hecho, una paralización, hubo unos minutos en los que la reunión es como si se hubiera congelado. Y a partir de ahí fue cuando Alemania empezó a moverse y la cosa se fue calmando. Pero hasta ese momento, parecía que no iba a haber acuerdo. Efectivamente, Holanda, Austria y Finlandia fueron países muy duros, no estaban dispuestos a ceder. El ministro le transmitió al presidente del Gobierno vía telefónica cómo estaba la situación, y fue cuando el presidente le mandó ese mensaje". "Rajoy incluso le llegó a decir que si había que suspender la reunión, y volver a negociar el domingo, que se hiciera. Porque España no podía salir de esa reunión con una línea de crédito condicionada macroeconómicamente, que esa era la línea roja que España no iba a saltar".
José Ángel Gutiérrez
joseangel@hispanidad.com
- El dinero que recibirá la banca española sale de "préstamos que hacen los estados miembros de la UE", "gracias al apoyo de los contribuyentes"
- Y "quien da dinero, nunca lo da gratis", afirma el vicepresidente de la CE
- Es decir, "ese préstamo lleva aparejadas unas condiciones y unos compromisos"
- "Lo que va a hacer la CE es negociar hasta el último detalle cada uno de los planes de reestructuración de las entidades financieras que reciben apoyo público", ha explicado
- Se trata de "un instrumento financiero de los estados miembros creado para atender necesidades de recapitalización u otro tipo de apoyo al sistema bancario
- Destaca que, para el caso español "ha sido la primera vez" que se crea un instrumento financiero como este "para atender necesidades de recapitalización u otro tipo de apoyo al sistema bancario"
- También explica que los intereses del crédito a la banca española computarán como déficit de España, aunque el préstamo "no computa como déficit y sí como deuda"
- Aunque luego, Amadeu Altafaj ha dicho que los intereses no computarán como déficit
- Amadeu Altafaj (CE) ve "razonable"que la ayuda a la banca tenga un interés entre el 3% y 4%
- Explica que el Estado español será el responsable en último término de la devolución del crédito, ya que es el que firmará el memorándum
- Da la razón al Gobierno español en cuanto a que no es un rescate al país: "La ayuda se ciñe al sector financiero", "creo que hay una distinción clara"
- Altafaj destaca la gran "solidaridad" de la UE
- Casimiro García Abadillo (tertuliano Onda Cero): "Holanda, Austria y Finlandia fueron países muy duros, no estaban dispuestos a ceder"
En la SER, el vicepresidente de la Comisión Europea, Joaquín Almunia, se ha referido a si los intereses del crédito a la banca española computan como déficit de España: "Los intereses sí, porque es un gasto. Pagar los intereses del préstamo es un gasto que está en el capítulo correspondiente de los presupuestos. Lo que es el préstamo no computa como déficit y sí computa como deuda".
Preguntado por las declaraciones del ministro de economía alemán, Schauble, que ha dicho que habrá una troika formada por la UE, el BCE y el FMI que controlarán la reestructuración de la banca en España, Almunia ha dicho: "Eso es así". "El FMI no financia –en el caso español, por no estar autorizado según sus estatutos, al ser un programa sectorial, o sea, sólo para el sistema financiero- pero se dice en el comunicado del Eurogrupo que el FMI está asociado, dada su experiencia, a las tareas de seguimiento de todo lo que vaya a suceder a partir de ahora en la utilización de ese dinero. Y en lo que se ha dado en llamar la troika, también estará el FMI, aunque no como cofinanciador".
Y ha añadido: "Quien da dinero, nunca lo da gratis. Aparte del tipo de interés que se cobre, siempre pone condiciones y quiere saber qué se hace con su dinero y hay que entender que eso es lógico". Sobre los controladores que vigilarán a España, ha afirmado: "Espero que actúen bien, de forma honesta, que no se crean que vienen a un país bananero. España es un país muy importante en Europa, en la zona euro".
Tras explicar que el dinero que recibirá la banca española sale de "préstamos que hacen los estados miembros de la UE", ha añadido que "lo que va a hacer la CE es negociar hasta el último detalle cada uno de los planes de reestructuración de las entidades financieras que reciben apoyo público". Es decir, "cada una de esas entidades financieras va a tener que presentar un plan de reestructuración, y ahí se va a ver con el máximo detalle cómo se reparten los esfuerzos, cuáles son los compromisos de esa entidad, cuál es el modelo de negocio de esa entidad, y de qué manera esa entidad -gracias al apoyo de los ciudadanos, de los contribuyentes- es capaz de ponerse otra vez a cumplir sin incertidumbres ni mayores problemas sus obligaciones, que es financiar a empresas y a familias".
Almunia ha recordado que el préstamo al FROB es "hasta un máximo de cien mil millones y prácticamente todo el mundo que ha estado observando el sistema bancario español sabe que esa es una cifra máxima". Y ha señalado que esta facilidad -a cambio de compromisos- "le puede dar el dinero al FROB en condiciones más favorables".
El vicepresidente de la Comisión Europea no ha querido pronunciarse sobre si es un rescate o no pero lo ha definido así: "Estamos hablando de un instrumento de los estados miembros y en particular de la zona euro, que está en condiciones de prestar dinero, o bien directamente al Tesoro de cada país o bien -en el caso de España, que ha sido la primera vez- a un instrumento financiero creado para atender necesidades de recapitalización u otro tipo de apoyo al sistema bancario. Y ese préstamo lleva aparejadas unas condiciones y unos compromisos".
Y ha añadido: "Es difícil ser optimista cuando lo que se acaba de reconocer es que por sí solo, el instrumento financiero con el que cuenta España para atender al sistema financiero tiene difícil financiarse en condiciones razonables en el mercado". "Pero sí es verdad que si se recapitalizan los bancos, si se les permite con ello fortalecer sus balances y alejar el riesgo de una insolvencia, van a estar antes en condiciones de cumplir con su obligación, que es dar crédito a la economía real".
Preguntado si sin Bankia hubiera sido necesario el rescate a la banca, ha respondido: "No lo sé. Bankia ha ido y es muy importante -ahí están los 23.000 millones como argumento", "pero es verdad que incluso antes de Bankia ya la situación de los mercados financieros, de la zona euro, y en particular de algunas economías de la zona euro era muy delicada. No hacía falta Bankia para darnos cuenta de que la situación era muy delicada y para saber que, en función de lo que pase el próximo domingo en Grecia, puede haber un shock muy fuerte en la zona euro o pueden empezar a verse luces de esperanza en el horizonte de la zona euro". Aunque, "ahora empieza a haber un cambio de tendencia que esperemos que se confirme primero en Grecia, donde haya una mayoría parlamentaria que apoye seguir en el marco de relación con sus socios que inició el Gobierno de Lukas Papademos y a partir de ahí esperemos que el sistema bancario español empiece a reestructurarse y fortalecerse de nuevo".
Preguntado por qué papel ha jugado el presidente de EEUU, Obama, en la decisión, ha señalado: "EEUU y Obama son plenamente conscientes de que si la zona euro sale adelante, la economía norteamericana se va a beneficiar de ello y viceversa". "Y eso le preocupa al presidente (Obama) porque piensa en los intereses de los ciudadanos norteamericanos y por supuesto le preocupa a meses de unas elecciones extraordinariamente importantes". "La crisis que tenemos en Europa vino de EEUU y ahora EEUU teme que las crisis de las economías de la zona euro repercutan allí".
Acerca de si ha quedado algo de la expresión 'la refundación del capitalismo', ha indicado: "Siempre pensé que aquella expresión era una frase hueca". "Esta crisis a donde nos debe llevar es a organizar un sistema financiero regulado, supervisado, controlado, para que no cometa los excesos que se han cometido y que nos han llevado a esta crisis. Y ese sistema financiero es global y nos tiene que llevar a adoptar decisiones en el ámbito europeo mucho más claras y contundentes que en el pasado, incluso en el ámbito global. Y es un sistema financiero que tiene que orientar sus financiaciones en la medida de los posible en desarrollos de sectores económicos y actividades económicas que beneficien a los ciudadanos y que no beneficien a unos pocos". "Esta crisis pone en la mesa de los políticos una reflexión muy sera sobre la imposibilidad de seguir aceptando desigualdades y privilegios como los que han crecido al calor de la euforia financiera".
Almunia ha destacado que parece que los mercados "están reaccionando de manera positiva, lo cual me parece estupendo, porque si después de una decisión como la que se ha tomado el fin de semana los mercados no la entienden, hemos hecho un pan como unas tortas". "Confío en que los mercados van a recibir esto como un alivio y que van a reducir tensiones y eso va a hacer mucho más fácil todo".
Amadeu Altafaj (CE) da la razón al Gobierno español en cuanto a que no es un rescate al país: "La ayuda se ciñe al sector financiero", "creo que hay una distinción clara"
En TVE, el portavoz de Asuntos Económicos y Monetarios de la Comisión Europea, Amadeu Altafaj, ha respondido a la pregunta de si él considera la reestructuración del sistema financiero español con cien mil millones como un rescate a España, tal y como niega el Gobierno español: "Yo lo entiendo. Porque no estamos en el caso de Grecia, (Irlanda) y Portugal. Por lo tanto, es importante marcar una distinción clara. Esto quiere decir, fundamentalmente, que se considera en Europa que España está acometiendo de forma correcta los retos en términos de sanear las cuentas públicas y de hacer reformas económicas para sostener el crecimiento y el empleo. Y la ayuda se ciñe al sector financiero". "Sin entrar en el debate semántico, creo que hay una distinción clara".
Altafaj ha confirmado que aunque las ayudas se canalicen a través del FROB, en última instancia, el que responde es el Estado. Según el portavoz, los intereses del préstamo no contabilizarán como déficit, porque ha aclarado que en "términos de contabilidad europea a este tipo de ayudas se les concede un tratamiento distinto", aunque sí aumentará la deuda. Luego ha matizado: "Cuando se establezca el plan de reestructuración y cómo van a ser canalizadas las ayudas a través del FROB, la agencia europea de estadística Eurostat establecerá con claridad estos criterios". "Pero pensemos que en ayudas de este tipo a otros países que han acometido rescates ha habido una separación y por lo tanto un tratamiento estadístico específico". "No me puedo pronunciar ahora definitivamente cuando todavía no conocemos el plan de reestructuración".
Y ha añadido que "no habrá más que las condiciones que se aplique en el sector financiero, pero estos préstamos se conceden a países que cumplen con un determinado orden en sus cuentas públicas y cumplían con los objetivos de déficit", al tiempo que recordaba que España "es uno de los países que menos recaudan en términos de IVA". Ha subrayado que serán "condiciones muy rigurosas que se ceñirán a todo el sector financiero, no sólo a los bancos afectados", y ha añadido que el Estado español será el responsable en último término de la devolución del crédito, ya que es el que firmará el memorándum.
No obstante, ha señalado que el crédito "en condiciones muy favorables para la economía española" debe hacer que las entidades con problemas de solvencia se fortalezcan, y el dinero pueda devolverse a través de mecanismos de mercado, como fusiones o adquisiciones. "Si no, evidentemente el Estado español es efectivamente el garante y los fondos públicos serían los que deben ayudar a la recapitalización, pero no se trata de salvar bancos a cualquier precio, y por supuesto no a banqueros ni a accionistas".
Preguntando sobre si los "hombres de negro", "la troika (BCE, CE y FMI) controlarán la reestructuración bancaria, Altafaj ha afirmado que "los llamados hombres de negro quieren preservar modelo económico y social de Europa y están del lado de España", y que "habrá visitas de funcionarios de la Comisión Europea y Banco Central Europeo" porque es "normal que quienes otorgan la ayuda, quieran pruebas de su buena utilización". El portavoz también ha valorado positivamente la participación del FMI en los controles "que aunque no participa directamente en el crédito, porque es otro programa, forma parte del esfuerzo de seguimiento".
Altafaj no ha querido dar detalles concretos sobre a qué tipo de interés se realizará el préstamo por considerarlo prematuro, aunque estima "razonable que oscile entre un 3% y un 4%", serán en todo caso "mucho más interesantes que los que encuentra España en el mercado". Altafaj, tampoco ha querido desvelar los plazos de vencimiento, y ha asegurado "que estos detalles se pactarán en las próximas semanas".
Altafaj ha destacado la gran "solidaridad" de Europa al articular esa ayuda al sistema financiero español y, antes, por el rescate a Irlanda Grecia y Portugal.
Casimiro García Abadillo (tertuliano Onda Cero): "Holanda, Austria y Finlandia fueron países muy duros, no estaban dispuestos a ceder"
En Onda Cero, el periodista Casimiro García Abadillo explicaba su información de hoy en El Mundo en la que cuenta las negociaciones entre De Guindos y la UE para rescatar al sistema financiero español. Rajoy le envió a Guindos un SMS en el que le dijo: "Aguanta, España no es Uganda". Luego De Guindos les dijo: "Si ustedes quieren forzar el rescate de España, vayan preparando 500.000 millones de euros y otros 700.000 para Italia, que tendrá que ser rescatada después de nosotros". Lo contaba así Casimiro García Abadillo: "Eso fue un órdago que provocó, de hecho, una paralización, hubo unos minutos en los que la reunión es como si se hubiera congelado. Y a partir de ahí fue cuando Alemania empezó a moverse y la cosa se fue calmando. Pero hasta ese momento, parecía que no iba a haber acuerdo. Efectivamente, Holanda, Austria y Finlandia fueron países muy duros, no estaban dispuestos a ceder. El ministro le transmitió al presidente del Gobierno vía telefónica cómo estaba la situación, y fue cuando el presidente le mandó ese mensaje". "Rajoy incluso le llegó a decir que si había que suspender la reunión, y volver a negociar el domingo, que se hiciera. Porque España no podía salir de esa reunión con una línea de crédito condicionada macroeconómicamente, que esa era la línea roja que España no iba a saltar".
José Ángel Gutiérrez
joseangel@hispanidad.com