El Congreso estadounidense tiene 30 días para votar la propuesta del Departamento de Defensa
Israel ha solicitado que Estados Unidos le venda mil bombas antibúnker guiadas por GPS para atacar instalaciones nucleares de Irán. La operación, que costaría 77 millones de dólares, está pendiente de ser aprobada por el Congreso estadounidense y precisaría la asistencia de asesores militares norteamericanos para su instalación en los aviones israelíes.
El principal objetivo de Israel es el centro de enriquecimiento de uranio de Natanz, fuertemente protegido por estructuras de hormigón. Las bombas penetran varios metros de concreto y tienen un margen de error de hasta ocho metros respecto del blanco.
El Departamento de Defensa de la administración Bush defiende que la venta de este armamento es "vital para los intereses de Estados Unidos en Oriente Próximo".