• La situación financiera de la cadena regional es un aviso para otras televisiones autonómicas.
  • Las TV catalana, andaluza y vasca plantean un problema desolador por la desproporción entre audiencia y presupuesto.
  • Extremadura destina 25,3 millones y Castilla La Mancha, el doble, 44,2 millones, con la misma audiencia del 4,4%.
  • Sólo tres reconocen deuda. En el resto, los Presupuestos lo pagan todo, aunque sea desproporcionado.
  • Todas las teles se han ajustado el cinturón y algunas, como la murciana, siguen emitiendo de milagro.

Superado el principal escollo, el fallo del Supremo sobre el ERE, llega el momento de hacer planes para Telemadrid. La sentencia salva la cadena, es cierto, pero no sus problemas económicos: tendrá que ser mucho más rigurosa en el gasto. El presidente madrileño, Ignacio González, ha confirmado hoy jueves lo que adelantó ayer su consejero de Presidencia, Salvador Victoria: la continuidad del canal. Ahora bien, también se mostró dispuesto "a estudiar en el futuro cualquier otro tipo de fórmulas" para asegurar su continuidad. En otras palabras, González abre la vía a la privatización.

La fórmula de la privatización podría ser una de tantas para evitar el desproporcionado peso que supone en los presupuestos de las autonomías mantener esos canales. La racionalización del gasto público pasa inevitable por un ajuste drástico.

En el caso madrileño, la cuestión se ha resuelto del modo que se ha resuelto. Queda por ver qué pasará con el resto de las cadenas, si están abocadas al cierre, como la valenciana Canal 9, o sobrevivirán con ajustes. En la mañana de este jueves, Ignacio González, tras apuntar que el fallo por el ERE "garantiza la viabilidad de una Telemadrid mucho más económica y con equilibrio en el Presupuesto", se reafirmó en que Telemadrid era imposible "con la estructura anterior". Telemadrid tenía en presupuesto en 2013 de 86 millones y una audiencia del 3,8%. Cabe preguntarse, por tanto, que pasará con las otras televisiones autonómicas.

Las tres cadenas que más presupuesto tienen, que en ningún caso se corresponde con su audiencia con la catalana, la andaluza y la vasca. Para la primera (TV3) la partida asciende a 295 millones, cuando tiene una audiencia del 13,5%, pero no se contempla un cierre ni como un mal sueño, por intereses políticos, al igual que en la vasca (ETB), con un presupuesto de 121 millones y una audiencia del 9,6%. La andaluza Canal Sur tiene mucho predicamento, teóricamente, pero la sigue el 9,9% de la audiencia y cuesta 165 millones.

Los siguientes en el escalafón son las teles de Valencia, que ya ha cerrado (costaba 78 millones, con una audiencia del 3,7%), la gallega (TVG), con un presupuesto de 103,8 millones y un 'share' del 10,8%, y la canaria (38,6 millones y un 7,2%).

Hay cadenas autonómicas con un cierto equilibrio entre lo que cuesta y su audiencia. Son las de Aragón (45 millones con un 11,5%), Baleares (31 millones y el 5,9%), Asturias (23 millones y un 5,4%),  y Extremadura (25,3 y el 4,5%). En el caso de Castilla La Mancha, la tele cuesta casi el doble (44,2 millones) para una misma audiencia (4,4%).

El caso más singular es el de la televisión de Murcia (7RM), que tiene presupuestados 7,8 millones de euros para una audiencia del 0,5%. ¿No habría que cerrarla a la velocidad de ya

Las únicas cadenas que reconocían su deuda en 2013 eran la valenciana (1.126 millones), Telemadrid (79 millones) y Canal Sur (80 millones).  El Presupuesto es más cómodo. 

Mariano Tomás

mariano@hispanidad.com