Según revela una encuesta publicada por la revista Figaro Magazine, el presidente francés, François Hollande, apenas cuenta con el respaldo de uno de cada cinco habitantes.
A su ya de por sí turbulenta vida personal, tiene ahora una nueva preocupación: la profesional. Y es que solo el 19% de los ciudadanos galos está convencido de que el mandatario es capaz de resolver los problemas del país.
Se trata de la primera vez que el índice de confianza del jefe del Ejecutivo baja del 20%, un espectacular mínimo histórico que nunca antes había registrado un presidente después de 21 meses en el cargo durante su primer mandato. De hecho, la publicación apunta a las dos notas más bajas reflejadas hasta ahora, la de Jacques Chirac, cuya popularidad bajó hasta el 35% en 1997, y la de Nicolas Sarkozy, que se situó en el 37% en 2009. Eso sí, Chirac se apuntó un 16% cuando estaban a punto de cumplirse dos años de su última legislatura.
Su presunto affaire con la actriz Julie Gayet y su ruptura con la periodista Valérie Trierwiller no parecer haber actuado al respaldo hacia Hollande. Sí lo han hecho sus últimas decisiones políticas, así como la vulneración de las promesas electorales con las que llegaron al poder y la realización de las mismas políticas que sus predecesores corregidas y aumentadas.
Una vez más se contradicen las promesas con las posibles realidades.
José Morales Martín