Así será El Economista, que sale a la calle el próximo 28 de febrero como el cuarto periódico de información económica de Madrid. En color naranja, con poco papel, una portada ágil. Los competidores se han puesto nerviosos, y mientras Expansión, en una política suicida, prepara nuevos recortes de gastos, la Gaceta acentúa su conversión en un diario de información general, al tiempo que amplía capital, y Cinco Días trata de sobrevivir a costa de convertirse en suplemento económico de diarios regionales.
La prensa económica española es de una notable capacidad técnica y de contenidos. Sus editores, sin embargo son dóciles a los grandes poderes económicos. Un ret recibirá un premio quien sea capaz de encontrar en las páginas de la prensa especializada (o no especializada) una crítica a Emilio Botín.
