La primera tarea del nuevo presidente de Repsol YPF, Antonio Brufau, ha sido tranquilizar a los directivos de la petrolera acerca de su futuro. En cualquier caso, eso que llaman cultura empresarial sí que debe existir, por cuanto han chocado dos formas de hacer.

Repsol es una empresa de ingenieros, amante de los informes de no menos de 100 páginas. Por tanto, durante las primeras reuniones han acudido a los encuentros con el nuevo presidente pertrechados de enormes cartapacios. Sin embargo, Brufau lo ha dejado claro: A mí contadme las cosas.