- Pero como lo pagamos todos los españoles…
- Desencuentros entre Soria y Nadal a cuenta del déficit de este año.
- Y mientras, las eléctricas confían en que la última reforma del sector se modifique durante su trámite parlamentario.
El ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria (en la imagen junto a Alberto Nadal), está en Corea del Sur, concretamente en la ciudad de Daeghu, para asistir al 22 Congreso Mundial de la Energía, un evento que sólo se celebra cada tres años.
Allí ha recordado que España es uno de los cinco países -junto a Suiza, Dinamarca, Suecia y Reino Unido- que ostentan la 'Triple A' del Consejo Mundial de Energía (WEC).
Y el mundo lo agradece. ¡Cómo no iba a hacerlo! Nuestro país se ha convertido en campo de pruebas de nuevas energías verdes, todas ellas aún muy inmaduras y, por lo tanto, muy caras. Esos mismos países, como Corea del Sur, que nos agradece de corazón nuestra presencia en dicho congreso, implantarán esas tecnologías en su momento, es decir, cuando ya estén desarrolladas y, por supuesto, no sean tan costosas. El coste ya lo habremos asumido los españoles. Somos así de… ecologistas.
Por cierto, durante su visita, el ministro Soria ha explicado a su homólogo coreano las reformas energéticas adoptadas y cómo éstas evitarán la generación de déficit eléctrico. No decía lo mismo hace tan solo dos semanas. A finales de septiembre, el propio Soria admitió que en 2013 habría un déficit de 2.500 ó 3.000 millones de euros, pero que el Gobierno permitiría titulizarlo.
Pero miren por dónde, este lunes, el secretario de Estado de Energía, Alberto Nadal, afirmó que este año no habría déficit y que, de haberlo, no se financiaría a través del FADE, el Fondo de Amortización del Déficit Eléctrico, utilizado para titulizar el déficit en los mercados.
El FADE "está cerrado", declaró Nadal, unas pocas semanas después de las declaraciones de su jefe, el ministro Soria.
A la luz del desencuentro Soria-Nadal, no sorprende que el presidente de UNESA, Eduardo Montes, afirmara este lunes en Cinco Días, antes de que el secretario de Estado corrigiera al ministro, que "el Gobierno debe asumir el déficit sorpresa de este año".
Una cosa está clara: a las eléctricas no les gusta la reforma, pero confían en que el texto se modifique durante su tramitación parlamentaria. Ya veremos. De momento, tenemos desencuentros.
Pablo Ferrer
pablo@hispanidad.com