El temor al maremoto enciende las alertas en el resto de países con costa en el pacífico. El maremoto ha llegado ya a Filipinas sin causar destrozos.
A medida que pasan las horas crece el número de fallecidos a consecuencia del maremoto que ha azotado las costas japonesas. Las cifras oficiales colocan el número de fallecidos en 100 personas, pero las cifras tenderán al alza si se tiene en cuenta el desconocimiento del número de desaparecidos. Al cierre de esta edición ya se empezaba a hablar de cifras de cuatro dígitos.
Además, aunque todavía no está confirmado, parece ser que las autoridades han encontrado 300 cadáveres en una playa de la prefectura de Miyagi y han desaparecido varias poblaciones costeras del noroeste del país, cercanas a la ciudad de Sendai. Además, el terremoto de 8,9 grados en la escala de Richter ha ocasionado cerca de 90 muertos.
El temor a que el maremoto llegara a las costas de otros países se ha extendido rápidamente y casi todos aquellos que tienen costa en el Pacífico han decretado la alerta, desde los más cercanos como Filipinas o Indonesia, hasta Australia y el sur de Sudamérica. La ola del maremoto ya ha llegado a las costas de Filipinas, aunque no hay que lamentar daños ya que ha llegado muy debilitada. En pocas palabras, el maremoto corre por todo el Pacífico hasta las costas americanas.
Mientras esto sucede, el resto del país se encuentra en caos, y un fiel reflejo es la capital, Tokio, ya que la gente está atrapada en la ciudad y no hay posibilidad de salir. Además, varias centrales nucleares se han visto afectadas por el temblor y se ha disparado la alerta nuclear, pese a que todavía no se conoce que haya habido ningún tipo de fuga.
Juan María Piñero
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