Sr. Director:
En estos días de la Navidad de Jesús, quisiera recordar al fallecido Yaser Arafat, que este año no podrá, como era su costumbre, asistir a la Misa del Gallo en Belén.
Aunque Yaser Arafat era un musulmán devoto, también quería ser el presidente de todos los palestinos, incluidos los cristianos. Por ello, no tenía inconveniente en respetar y promover las manifestaciones públicas de su fe.
¡Y pensar que en España hay fundamentalistas que quieren censurar la Navidad porque dicen que ofende a los no cristianos! Va a resultar que hasta un musulmán tan aguerrido como Arafat era más tolerante que ellos.
Bartolomé Cuerda
bartolomecuerda@yahoo.com
