Caja Madrid ganó 265 millones de euros, un 68% menos que un año antes, y termina el ejercicio con un 5,5% de mora, muy superior al del cierre de 2009 aunque es verdad que empieza a contenerse, como lo es que esa mora ha destruido todo el beneficio. Es el regalo envenenado que Miguel Blesa cede a Rodrigo Rato, quien el próximo día 28 de enero tomará posesión de su nuevo cargo como presidente de Caja Madrid. El ex vicepresidente del Gobierno Aznar va a tener trabajo. Y ojo, porque en principio entra sin director general y sin portavoz.
Pero lo más importante del Consejo de Administración de la entidad celebrado el lunes, la despedida de Miguel Blesa, fue el crédito de más de 25 millones que la entidad tiene con el dueño de Marsans (junto a Gonzalo Pascual) y presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, a la sazón consejero de Caja Madrid. Más de un consejero se quedó de piedra cuando el presidente Blesa especificó que el crédito había sido concedido sin garantía. Tuvo que explicarlo por la sencilla razón de que advirtió que si los dueños de Marsans no aportaban garantías se les embargaría (es decir, tendrá que embargarles Rato).
Así que ya lo saben: si eres consejero de Caja Madrid puedes recibir un crédito de 25 millones de euros sin garantías y luego también te puedes permitir el no pagarlo.
Eulogio López
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