El Premio Francisco Cerecedo de Periodismo siempre ha sido uno de los refugios monetarios del progresismo periodístico. Figúrense si será así que uno de sus impulsores ha sido Miguel Ángel Aguilar.
Ahora se acaba de conceder, en su Vigésimo Primera Edición, a Antonio Tabucchi, y el acta de concesión asegura que se le otorga, entre otras cosas, como creador de Pereira, un personaje literario que, a juicio del Jurado, es un arquetipo de la libertad de prensa.
El premio, dotado con 24.040 euros, está financiado por el BBVA, el mismo banco que está censurando a periodistas a costa de amenazar a los medios en los que escribe con retirar su publicidad. Y suele obtener éxito con sus presiones.