El presidente de Indra, Javier Monzón, se muestra escéptico con la posibilidad de que existan accionistas estables y de largo plazo: Son como las meigas, dijo Monzón en un desayuno organizado este miércoles por Nueva Economía Forum. Monzón acepta que busquen la rentabilidad, aunque asegura encontrarse muy satisfecho tanto con Caja Madrid como con el fondo Fidelity, es decir, que no tiene preferencia entre fondos u otro tipo de inversores. Claro que, con un mayor dividendo los accionistas con vocación de permanencia se sentirían más atraídos.
Por el momento, Caja Madrid tampoco tiene intención de moverse. La entidad madrileña (primer accionista, con una participación del 20%) se encontraría con minusvalías si quisiera vender. En bolsa, Indra rodea los 14 euros por acción en los últimos meses tras acumular una caída anual del valor del 15%.
La compañía ha tenido que centrarse en el exterior, donde Monzón pone sus expectativas de crecimiento en resultados y en empleo tras reconocer que en España ganarán menos que en 2009. No obstante, espera acabar el ejercicio repitiendo resultados.
Mariano Tomás
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