Aunque ya ha cumplido los 86 años, Clint Eastwood sigue en activo como director, con las mismas ideas que siempre, es decir, le gustan las historias de héroes. Por eso no es extraño que le atrajese la idea de llevar a la gran pantalla la de Chesley Burnett Sullenberger, conocido como "Sully". En concreto el guionista de la película, Todd Komarnicki, se basó en su autobiografía. El 15 de enero del año 2009 cambió la vida de las 155 personas que viajaban en un Airbus 320 de la compañía US Airways que realizaba el trayecto entre Nueva York a Charlotte, en Carolina del Norte, porque, cuando no se había cumplido una hora del despegue, el avión recibió un fuerte impacto provocado por una bandada de aves. Este golpe afectó al fuselaje y a los motores, de ahí que el comandante Sully decidiera la peligrosa hazaña de aterrizar en el río Hudson que dio como resultado que salieran  vivos  todos los que viajaban en ese avión, aunque 78 de ellos resultaran heridos. Esta sobresaliente acción convirtió a Sully en el hombre más admirado entre los ciudadanos de a pie, pero a esa proeza siguieron acontecimientos menos recordados, pero más dramáticos, para este comandante. Asombra, porque creíamos que era más propio de nuestra idiosincrasia que de la estadounidense, la desconfianza que algunos mandos de la aviación mantuvieron hacia el logro de Sully. En vez de alabarlo por esta gesta se dedicaron a investigar los hechos hasta unos extremos absurdos que parecían encaminados a destrozar su vida profesional. Con el estilo narrativo cinematográfico clásico que caracteriza a Eastwood y contando como protagonista con el siempre fiable actor Tom Hanks, quien se ha puesto bajo las órdenes de Clint por primera vez, este drama resulta una propuesta muy agradable de ver si les gustan los relatos positivos. Así, resulta muy emocionante la recreación de ese vuelo y, lógicamente, su accidentado aterrizaje en el Hudson pero, para el público español que se quedó con esa noticia y esas impactantes imágenes, también les parecerá  interesante el proceso abierto por la Seguridad Aérea americana en el que se vio involucrado, a su pesar, el protagonista de este relato. No es una de las mejores películas de Eastwood, pero sí un retrato de un auténtico héroe americano. Para: Los que les guste el cine de Eastwood cuando es esperanzador Juana Samanes