La familia de patos Mallard vive en un estanque de Nueva Inglaterra, debido a que el papa Mack es un ejemplar sedentario. Pero a mamá Pam ese mundo se le hace pequeño y desea conocer otros lugares y enseñárselos a sus hijos, el adolescente Dax y la pequeña Gwen. Cuando otra familia de patos para circunstancialmente en su estanque, y les habla de la belleza de lugares como Jamaica, Pam convence a Mack de que deben emigrar, lo que desconocen son las arriesgadas aventuras a las que se enfrentarán en esa travesía.

Los creadores de Los Minions o Gru: Mi villano favorito, los estudios de animación Illumination, estrenan en las salas de cine   la propuesta navideña más divertida y simpática dirigida a toda la familia: Migración. Un viaje patas arriba.

Desde la primera secuencia de esta comedia de aventuras ya se vislumbra que se trata de un film lleno de humor, porque la manera en que el padre y la madre relatan un cuento es totalmente divergente y, de alguna manera, les retrata en su forma de educar a sus hijos: mientras el progenitor les infunde temor ante lo desconocido, la pata Pam pone emoción a cualquier acontecimiento novedoso. Y esta diferente visión también nos indica que estamos ante una película dirigida a todos los públicos que no solo goza de una calidad de animación fantástica sino que, además, encierra valores en su contenido, a favor de los indestructibles lazos familiares, de la necesidad de soltar amarras a los vástagos cuando crecen, de preocuparse por los demás y no sólo por uno mismo etc…

Detrás de la cámara de este gracioso film se encuentran pesos pesados del mundo de la animación y el cine destinado a todas las edades. Así el director Benjamin Renner fue nominado a un Oscar por Ernest y Celestine – Cuento de inviernoEl malvado zorro feroz, mientras  el guionista Mike White, escribió la historia de la desternillante Escuela de rock.

Si los gags graciosos no dan tregua, como era de esperar tratándose de los estudios Illumination (ahora mismo la competencia más directa e imaginativa de la factoría Disney), la animación de la película es brillante, ofreciendo parajes de todo tipo bien filmados. Resulta magistral en imágenes el accidentado vuelo de la familia de patos a través de la ciudad de Nueva York, plagada de obstáculos que pueden hacer peligrar su vida, o el paraíso efímero de unos patos bastante inocentes sobre su futuro…

Pero, sin duda, las escenas donde la carcajada es continua transcurren durante el rescate de un loro dicharachero que se ha convertido, a su pesar, en la mascota de un cruel chef.

Si la contemplan en versión original podrán disfrutar de las voces de intérpretes tan conocidos como Elisabeth Banks, Danny de Vito o Awkwafina.

Para: los que les guste el cine de animación de los 5 a los 90 años.