- El secretario ejecutivo de la OCDE, Ángel Gurría, alienta al primer productor mundial del metal a dar el salto hacia una economía más basada en el conocimiento y la innovación.
- Chile debería también diversificar su economía, aumentar su productividad, ampliar su base exportadora y mejorar sus niveles de desigualdad.
- Y la zanahoria: el organismo celebró las reformas sociales de Michelle Bachelet, que incluyen una reforma tributaria, de la educación y del sistema laboral.
"Chile debe pasar del cobre a la neurona", recomendó el secretario ejecutivo de la
OCDE,
Ángel Gurría (
en la imagen), al alentar al primer productor mundial del metal a dar el salto hacia una economía más basada en el conocimiento y la innovación, informa
AFP.
Al entregar el último 'Estudio de la OCDE sobre la economía chilena', Gurría alentó a Chile a "ahondar en unas transformaciones económicas que rehuyan una excesiva dependencia de las exportaciones de materias primas y permitan avanzar hacia una economía más basada en el conocimiento y la innovación".
Con un tercio de la oferta mundial, equivalente a unas 5,6 millones de toneladas anuales, Chile es el principal productor mundial de
cobre, cuyo precio se ha desplomado a un mínimo en seis años.
La economía chilena debería cerrar este año con una expansión de un 2,2%, lo que de acuerdo a la OCDE refleja que pese a la brusca caída del precio del cobre, "el crecimiento económico de Chile ha sido resiliente".
Para 2016, la expansión proyectada del PIB chileno alcanzaría el 2,6%, mientras que para 2017 llegaría a 3,3%, según los datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
Para mantener o mejorar esos niveles, Chile debería diversificar su economía y aumentar su productividad: "
Mejorar la productividad es sin duda el principal reto que enfrenta la economía chilena para seguir creciendo y aumentar el nivel de vida de la población", afirmó el economista mexicano.
Según los datos de la OCDE, para aumentar sus niveles de productividad Chile debería mejorar la competencia en su economía, y destinar más recursos a investigación y desarrollo, que hoy lo sitúan como la nación que destina menos recursos a este fin en la
OCDE (0,4% de su PIB).
El país debe, además, "ampliar su base exportadora e insertarse mejor en las cadenas globales de valor, en especial en materia de conocimiento y valor agregado", agregó.
También mejorar sus niveles de desigualdad, por los que el 10% más rico de su población recibe ingresos 27 veces por arriba que el 10% más bajo.
Todo lo anterior fue el palo de la OCDE a Chile. Y ahora viene la zanahoria: el organismo celebró las reformas sociales que está implementando el gobierno de la mandataria socialista
Michelle Bachelet, que incluyen una reforma tributaria, a la educación y al sistema laboral.
José Ángel Gutiérrez
joseangel@hispanidad.com