Apenas son 31.303 votos los que separan al bloque de izquierdas (Psoe, UP, Más País y Compromís) del de derechas (PP, Vox, Cs y NA+), aunque en número de escaños la diferencia es de seis: 158 frente a 152. Son las dos Españas, eso sí, sin contar con los votos de los nacionalistas y separatistas como ERC, JxCat, el PNV o el BNG.

Primera sorpresa: la diferencia en abril fue de 60.742 votos… a favor de la derecha. Efectivamente, el 28-A, el bloque de izquierdas logró 11.264.287 votos frente a los 11.325.029 del bloque de derechas, a pesar de que la diferencia en número de diputados fue mayor a favor de la izquierda.

En el 10-N se ha dado la vuelta a esta situación -ha habido más votantes de izquierdas-, sobre todo por el descalabro de Ciudadanos, que se ha dejado 2.518.125 votantes por el camino. Una cifra que no han compensado los 646.216 nuevos votantes del PP ni los 951.971 españoles que han votado a Vox y que no lo hicieron en abril. Como era de esperar, Albert Rivera ha dimitido este lunes como presidente de Ciudadanos y ha anunciado que deja definitivamente la política.

Los dos bloques han perdido votos y, en contra de lo que podría parecer, ha sido el de derechas el que más ha sufrido el abandono de los votantes. Nada más y nada menos que 929.109 votantes menos que en abril, frente a los 837.064 que no han votado a la izquierda. En otras palabras: la derecha ha perdido más votos que la izquierda, a pesar de reducir la distancia en número de representantes.

Son las dos Españas, separadas por apenas 31.303 votos.