Ismael Clemente, consejero delegado de Merlin Properties, ha pedido “no continuar atacando al régimen Socimi”, ¿lo habrán oído en Podemos? Este tema ha sido el centro de su discurso en la Cumbre empresarial de la CEOE, muy distinto al que pronunció en la Junta de Accionistas de la socimi el pasado miércoles.

El CEO de Merlin Properties ha defendido el régimen Socimi, que existe en 60 países de la OCDE, y que en su opinión, “ha modernizado y profesionalizado el sector inmobiliario” tras la crisis que sufrió hace unos años. Asimismo, es partidario de que se desarrolle dicho régimen y se homologue con el de otros países, apostando, por ejemplo, “como en EEUU, por permitir la neutralidad fiscal de las aportaciones de activos a una socimi a cambio de capital, en España estas aportaciones tributan y en los países del entorno no lo hacen salvo cuando se dispone de acciones”. Además, ha añadido que el fomento de estos vehículos en EEUU aumentó su tamaño y competitividad, y se perfilan como importantes mecanismos de ahorro privado.

Ismael Clemente ha criticado que se mezcle a las socimis con vivienda (impacto en subidas de precios) y elusión fiscal. Al hilo de lo primero, ha señalado que las socimis que cotizan en el Continuo no tienen vivienda en sus carteras, ni tampoco muchas de las del Mercado Alternativo Bursátil (MAB). Y respecto a la elusión fiscal, ha advertido que no es que no paguen impuestos, sino que se pospone el momento en que la administración tributaria lo recibe: “Se percibe no en origen sino cuando se elevan los flujos hasta el inversor”.

Respecto a los centros comerciales, el CEO de Merlin Properties ha pedido mayor flexibilidad de horarios y de uso para que los impactados por el coronavirus puedan reconvertirse en logística de última milla o centros cívicos. Asimismo, ha solicitado más coordinación con las administraciones para las conexiones de la logística y que se permita a las empresas con activos inmobiliarios el autoconsumo energético.

Al final, las Socimi representan un instrumento para que la clase media pueda rentabilizar sus ahorros sin excesivo riesgo, dado que las socimis están obligadas a repartir un 80% de sus beneficios en dividendo. De ahí su èxito. Pero, miren por dónde, Podemos quiere recargarlos con un impuesto extra. A Pablo Iglesias no le gustan los inmobiliarios.