- El relevo del presidente ha sido un sí o sí de la banca para una línea de liquidez de 31 millones a cinco meses.
- Del Valle seguirá como consejero, sin poderes ejecutivos, y a cambio la banca retira la exigencia de avales personales.
- Acacio Rodríguez, consejero independiente, ha mediado con los acreedores para llevar sus exigencias al Consejo de Administración.
- Con cinco meses por delante y la prórroga para renegociar la deuda, la banca espera a la llegada de un socio industrial.
- Prefiere a la asturiana TSK o a Acciona y lo le gustan los chinos de China State, que sólo quieren una licencia.
La
banca acreedora tiene ya la solución para resolver, de momento, crisis de liquidez de
Duro Felguera, y esa solución pasa, sí o sí -sin más alternativas-, por la caída de su presidente,
Ángel Antonio del Valle, a quien sustituye en el cargo
Acacio Rodríguez, hasta ahora consejero independiente.
A cambio de ese relevo, facilitará una
línea de liquidez de 31 millones con un plazo de cinco meses, para que la ingeniería pueda sostener su actividad y afrontar los pagos, por ejemplo, de las
nóminas.
No ha sido una negociación fácil, sobre todo por la
resistencia del propio Ángel del Valle -también accionista y representante de la propiedad (24,4%)-, pero no se le han dado otras opciones (desde la banca, naturalmente), por
falta de confianza en su gestión.
Del Valle había amenazado con llevar la empresa a concurso de acreedores, una opción indeseable, y seguirá como consejero de la sociedad, pero sin poderes ejecutivos, y a cambio la banca retira la exigencia de
avales personales que había planteado para ponerle a prueba, aunque no había respondido a esa propuesta.
La resistencia al relevo llevó a los bancos a negociar directamente con tres consejeros, no accionistas de Duro Felguera, entre ellos el propio Acacio Rodríguez (los otros dos son
Javier Canga y
Elena Cabal), a la espera de un acuerdo al que finalmente se ha llegado. Las negociaciones empezaron el lunes con reuniones maratorianas posteriores del
Consejo de Administración.
Con la línea de liquidez de 31 millones se permiten liberar avales anteriores y el desbloqueo de fondos pignorados de Duro Felguera. Ese
grifo corre en paralelo a la prórroga concedida por los bancos acreedores para renegociar la deuda. Ese plazo es hasta el próximo 15 de enero.
Ese acuerdo para alargar plazo (
standstill) fue impulsado desde
Santander, el más expuesto en la empresa (un 54% del riesgo financiero) -por ese motivo
no le quedaba otra-, al que se sumaron
Caixabank y
Sabadell, en primer lugar, después
Bankia y
BBVA, que completan el núcleo, y este jueves
Liberbank y el
Banco Cooperativo Español.
En los plazos marcados en la prórroga y la línea de liquidez, los bancos esperan también la llegada de un
caballero blanco como futuro
socio industrial.
Era y sigue siendo otras de las condiciones para la viabilidad de la compañía. Ahí también la banca tiene preferencias, como la ingeniería asturiana
TSK o
Acciona, pero no le gustan los chinos de
China State Construction Engineering (CSCE), que han mostrado interés, pero a juicio de la banca sólo busca el modo de entrar en escena para obtener una licencian de actividad (equivalente a una ficha bancaria en el sector financiero).
Rafael Esparza