El derribo de la Cruz de Aguilar de la Frontera demuestra que lo único que buscaba Carmen Flores era “acabar con un símbolo cristiano, tal y como hemos visto en otras localidades gobernadas por los mismos partidos”, denuncia Abogados Cristianos
La cruzfobia crece en España, tristemente, debido a la cristofobia de la izquierda socialista, podemita y comunista: la última muestra llega desde Aguilar de la Frontera (Córdoba). Este martes, la Asociación Española de Abogados Cristianos ha presentado un querella por la vía penal contra la alcaldesa de la citada localidad, Carmen Flores (Izquierda Unida-Los Verdes-Convocatoria por Andalucía), por derribar una Cruz.
En concreto, la organización de juristas la acusa de los delitos de prevaricación con el agravante de discriminación y daños contra el patrimonio. Al mismo tiempo, pedirá la inhabilitación para ejercer cargo público y ha empezado acciones por la vía contenciosa por las irregularidades cometidas durante el derribo, el cual intentó parar a primera hora pidiendo medidas cautelarísimas ante el Juzgado de lo Contencioso Administrativo de Córdoba. Y es que conviene destacar que esta “Cruz no incumple con la Ley de Memoria Histórica ya que no contiene ninguna inscripción”.
Polonia Castellanos, presidenta de Abogados Cristianos, afirma que la decisión de derribo del monumento parte de la discriminación y animadversión de la mandataria hacia los cristianos
Este martes, Aguilar de la Frontera se ha quedado sin la Cruz del Llanito de las Descalzas, que pertenece al conjunto histórico artístico del Monasterio de San José y de San Roque, el cual fue declarado Bien de Interés Cultural (BIC) en 1983. Polonia Castellanos, presidenta de Abogados Cristianos, denuncia que “el derribo del monumento es ilegal ya que no se aprobó en Pleno ni contó con el proyecto competente para actuar en un entorno BIC”. Además, Castellanos desvela que “la propia alcaldesa ha reconocido que desde Cultura (como se puede ver en el vídeo inferior) les han dicho que no pueden demoler la Cruz amparándose en la Ley de Memoria Histórica, lo que evidencia que la decisión de derribo del monumento parte de la discriminación y animadversión de la mandataria hacia los cristianos”. Por tanto, esto demuestra que lo único que ha buscado es “acabar con un símbolo cristiano, tal y como hemos visto en otras localidades gobernadas por los mismos partidos”.
Durante el derribo, algunos vecunos de Aguilar de la Frontera han gritado: “Os estáis saltando la ley” o “Viva Cristo Rey”. Incluso algunos se han lanzado a entonar el canto “Alabaré a mi Señor”, como se puede ver en el siguiente vídeo.