- El consistorio madrileño dedicará un memorial en el cementerio de la Almudena a todos los fusilados por el franquismo en sus tapias entre 1939 y 1944.
- A todos, sin distinción, incluidos 335 nombres acreditados como miembros de checas de Madrid, según revela ABC.
- Al menos 134 de esos homenajeados participaron activamente en matanzas y asesinatos organizados desde centros de detención y torturas que dejaron, según historiadores como Alfonso Bullón de Mendoza, un reguero de 2.625 muertos solo en la capital.
- La investigación ha costado a las arcas municipales 12.000 euros.
La Memoria Histórica -o lo que es lo mismo, el '
guerracivilismo'- se ha convertido en una de las obsesiones de la política municipal de la capital desde la llegada a la alcaldía de
Ahora Madrid.
La alcaldesa
Manuela Carmena, a través de la Oficina de Derechos Humanos y Memoria, ha revisado -con más polémica que éxito- el terror de la Guerra Civil en la capital con el objetivo de recordar a los represaliados.
Una tarea encomendada al tercer teniente de alcalde,
Mauricio Valiente, que, sin embargo, ha obviado hasta la fecha a un número importante de las víctimas: las represaliadas por el bando republicano, informa
ABC.
El último ejemplo de esta
política sesgada del recuerdo se halla en el memorial que el consistorio dedicará en el cementerio de la Almudena a todos los fusilados por el franquismo en sus tapias entre 1939 y 1944. A todos, sin distinción,
incluidos 335 nombres acreditados como miembros de checas de Madrid.
Entre los 2.934 hombres y mujeres que incluirá y que fueron ejecutadas durante la posguerra hay,
a juicio de las fuentes consultadas por ABC, diferencias insalvables que hacen complicado comprender que compartan recuerdo en el mismo memorial.
Una de ellas es el trabajo de
Manuel García Muñoz. Se da la paradoja de que es uno de los expertos contratados por el Ayuntamiento para la elaboración del informe que incluye los cerca de 3.000 nombres que pretenden homenajear este año.
ABC ha cotejado la lista presentada por los investigadores -que ha costado a las arcas municipales 12.000 euros- con la relación que figura en su libro «Los Fusilamientos de La Almudena».
El resultado es que entre los ejecutados que Carmena pretende homenajear, figuran al menos esas 335 personas recogidas por el propio autor como «
chequistas» en su riguroso estudio de cada uno de los fusilados en el Cementerio del Este, hoy de La Almudena.
Al menos 134 de esos homenajeados participaron activamente en matanzas y asesinatos organizados desde esos centros de detención y torturas que dejaron, según historiadores como Alfonso Bullón de Mendoza, un reguero de 2.625 muertos solo en la capital.
Muchos de ellos, por cierto, fueron enterrados en fosas comunes en el mismo cementerio ante el problema de salud pública que supuso la aparición de
innumerables cadáveres en las calles, jardines y parques de Madrid.
El documento, que según el Gobierno de Ahora Madrid «arroja datos seguros y fiables ya que han accedido a documentación inédita», fue presentado el pasado 13 de febrero por el profesor e historiador de la complutense Fernando Hernández y el propio Mauricio Valiente.
Tomás Montero Aparicio y los historiadores Juan Carlos García Funes, Fernando Jiménez Herrera y Santiago Vega Sombría, de la Universidad Complutense de Madrid, así como por Daniel Oviedo Silva, de la Universidad de Nothingham, también han participado de la citada investigación.
A pesar del riguroso estudio sobre el historial de cada uno de los ejecutados que elaboró
García Muñoz en su libro, la lista municipal a la que ha tenido acceso ABC no hace distinción alguna entre las víctimas republicanas ejecutadas sin otra culpa que el compromiso con sus ideas y aquellas otras sobre las que, sin embargo, pesaban crímenes de
lesa humanidad.
Andrés Velázquez
andres@hispanidad.com