Las cuentas del FROB, que preside Jaime Ponce, constatan el fracaso del saneamiento bancario.
En la Comisión de Presupuestos, este miércoles tambien se ha hablado de Bankia. En concreto, de su proceso de privatización o lo que es lo mismo, la “estrategia de desinversión” en palabras del presidente del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), Jaime Ponce. No escucha así al BCE, que ha presionado al ministro de Economía, Ramón Escolano, para acelerar el proceso de venta.
Desde el pasado 11 de diciembre, cuando se colocó un paquete del 7%, que supuso en torno a los 800 millones de euros, “se mantiene la misma senda”. Es decir, un “seguimiento continuado del mercado” para ir haciendo bloques/paquetes.
“No hay ninguna decisión tomada” respecto a retrasar o acelerar la privatización de Bankia. El plazo legal acaba a finales de 2019 y el FROB apuesta por el cumplimiento del mandato legal. “Ahora bien, la norma también prevé la posibilidad de que el Gobierno extienda el plazo”, ha afirmado Ponce. “Quedan dos años y es prematuro valorar si es necesaria una ampliación” de dicho plazo, ha añadido.
Respecto a las colocaciones de bloques, el presidente del FROB ha insistido en que no hay ninguna necesidad de precipitación, ni ansiedad”, pero “sí hay voluntad de aprovechar las oportunidades del mercado para maximizar la recuperación de la inversión”.
En la Comisión de Presupuestos, también ha salido el tema de la fusión BBVA-Bankia. Ponce ha señalado que no le consta y que los gestores de dichas entidades están más facultados para pronunciarse al respecto y “han hablado claro”.