- Entre los principales puntos acordados y fijados en un documento de 28 páginas, destaca la limitación de la llegada de refugiados a 220.000 por año.
- También, el compromiso de "reforzar y reformar" la zona euro "en estrecha colaboración" con Francia.
- Además, el preacuerdo de este viernes prevé aumentar los fondos de ayuda social, sin por ello tener que incrementar los impuestos.
- Merkel ha gobernado junto al SPD en dos de sus tres mandatos, incluida la gran coalición de 2013 hasta las elecciones de septiembre de 2017.
Tras cinco días de conversaciones y una ronda final negociadora de más de 24 horas de duración, la canciller alemana,
Angela Merkel (CDU), y el líder socialdemócrata, Martin Schulz (SPD),
confirmaron este viernes que han alcanzado un acuerdo para una futura Gran Coalición.
En una comparecencia conjunta con
Schulz y el presidente de la
Unión Socialcristiana (CSU) de Baviera, Horst Seehofer, Merkel anunció que las tres formaciones recomendarán el inicio formal de negociaciones tras alcanzar un acuerdo "sólido y serio", capaz de garantizar la "gobernabilidad del país" durante toda la legislatura, informa
DW.
Entre los principales puntos acordados y fijados en un documento de 28 páginas, destaca la limitación de la llegada de refugiados a 220.000 por año y el compromiso de "reforzar y reformar" la zona euro "en estrecha colaboración" con Francia con el objetivo de que el euro "pueda afrontar mejor las crisis globales", añade
RTVE.
Sobre el primer punto,
el documento especifica que "las cifras de inmigrantes (incluidos los refugiados por guerras, los relacionados con reagrupación familiar y los reasentamientos, y restando a aquellos que abandonen el país) no sobrepasarán la horquilla de 180.000 a 220.000 al año".
Sólo en el capítulo de las reagrupaciones familiares, el pacto establece un máximo de entrada de 1.000 refugiados al mes. Esa reunificación se aplicará a los matrimonios previos a la salida de su país de origen de uno de los cónyuges, y siempre que a la persona en cuestión no se le atribuya ningún delito. Además,
el borrador del principio de acuerdo establece que se reducirá en esa misma cuantía los inmigrantes llegados desde Grecia e Italia dentro del esqueña diseñado por la UE.
Respecto a la UE, destaca la intención de apoyar la transformación del mecanismo de rescates en un organismo al estilo del FMI que esté bajo control del Parlamento Europeo, y el destino de "fondos presupuestarios específicos" a la estabilización económica, la convergencia social y las reformas
estructurales en la zona euro. Esos fondos "podrían servir de base a un futuro presupuesto de inversión de la eurozona", se lee en el documento.
Estos propósitos para Europa, defendidos por los socialdemócratas, parecen ir en la línea de las propuestas presentadas por la Comisión Europea.
Además, el preacuerdo de este viernes prevé aumentar los fondos de ayuda social, sin por ello tener que incrementar los impuestos,
algo marcado como una línea roja a lo que se oponía la CSU.
El compromiso alcanzado debe ser aprobado ahora por las bases socialdemócratas, convocadas a un congreso extraordinario el próximo día 21, antes de que se celebren las negociaciones formales para diseñar un programa de gobierno.
Ese pacto final se sometería de nuevo al voto de la militancia del SPD, muy dividida ante la posibilidad de una nueva alianza con los conservadores.
Merkel ha gobernado junto al SPD en dos de sus tres mandatos, incluida la gran coalición de 2013 hasta las elecciones de septiembre de 2017. Esa cohabitación ha pasado factura, sobre todo, a los socialdemócratas que, en esos comicios,
obtuvieron su peor resultado electoral desde la fundación de la actual república en 1949.
José Ángel Gutiérrez
joseangel@hispanidad.com.