Los ‘okupas’ podrán empadronarse para recibir la renta mínima

Los okupas de viviendas ajenas podrán darse de alta en el padrón municipal donde habiten para poder acceder a las ventajas que esta situación les puede reportar, como las ayudas del Covid-19, incluida la renta mínima. Así se establece en una resolución de la Presidencia del Instituto Nacional de Estadística y de la Dirección General de Cooperación Autonómica y Local, por la que se dictan instrucciones técnicas a los Ayuntamientos sobre la gestión del Padrón. Basta la habitualidad en la vivienda sin importar la titularidad. (El Economista)

La revuelta contra el estado de alarma ya está en marcha. Partidos políticos de diverso color ideológico, y autonomías de distinta afinidad, se muestran contrarios a la prórroga sucesiva del estado del alarma como marco para gestionar la crisis del Covid-19. Rechazan el «mando único», la imposición y unilateralidad que conlleva y reclaman ya el abandono de la excepcionalidad y la vuelta a la normalidad constitucional. Una normalidad a medias, porque los riesgos sanitarios persisten, pero que, según los críticos, podría gestionarse con más eficacia con los instrumentos de la legislación ordinaria, en la medida en que también ofrecen gran capacidad de control y al tiempo garantizan la «cogobernanza» para acompasar el desconfinamiento a la realidad de los territorios. Las normas que se barajan como alternativa al estado de alarma son la Ley General de Salud Pública de 2011 y la Ley Orgánica de Medidas Especiales en Materia de Salud Pública, de 1986. Esta última reformada el pasado 11 de marzo para contemplar la posibilidad por parte del mando único de centralizar la adquisición y distribución de «productos para la protección de la salud» como mascarillas o guantes. (El Mundo)

El PP defiende un plan B con la ley de Seguridad Nacional como alternativa al estado de alarma. (ABC) 

Fernández Mañueco (Presidente de la Junta de Castilla y León): “Apoyar el estado de alarma no puede ser un cheque en blanco, no hay planificación”. “Lejos de buscar un consenso, Sánchez se ha instalado en la posición ‘todos conmigo o contra mí’. Entiendo que las fuerzas políticas no den su voto si niega el diálogo”, dice. (Expansión)

La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, asegura a la Comisión Europea y al resto de socios comunitarios que se le fue el gasto «en todas las rúbricas» por valor de 7.000 millones durante las últimas semanas de 2019. Y lo alega como razón fundamental de haber incumplido el objetivo de déficit prometido. ¿Cómo es posible que el Ministerio de Hacienda no supiera en octubre que el Estado iba a incurrir en 7.000 millones más en las semanas siguientes hasta fin de año? «En el caso de los gastos, se han registrado desviaciones al alza respecto a la previsión de octubre en todas las rúbricas, destacando el caso de la remuneración de asalariados y de las transferencias sociales», se limita a explicar. (El Mundo)

Tras la confirmación oficial del hundimiento de la economía y con la sombra de la intervención planeando sobre España, el Ejecutivo estudia un severo paquete de recortes entre los que destaca un duro ajuste del sistema público de pensiones. El Gobierno calcula unas necesidades de liquidez de 140.000 millones para enjugar la crisis sanitaria. Moncloa no descarta congelar las pensiones contributivas y endurecer los requisitos de acceso. Se tendría en cuenta toda la vida laboral y se limitarían las de viudedad según el nivel de renta. (La Razón)

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha decidido tirar de deuda pública para luchar contra el coronavirus. Ha gastado 150.000 millones de euros, pero no tiene en el horizonte realizar ningún tipo de ajuste, ni siquiera en el tamaño de la Administración. Mantiene, por contra, la intención de subir las pensiones, el sueldo de los funcionarios, crear la renta mínima y aumentar la estructura del Ejecutivo. (El Economista)

En España, la ley estipula que los directores generales de los ministerios deberán nombrarse entre funcionarios de carrera del Estado, de las Comunidades Autónomas o de las Entidades locales, pero deja en manos del Consejo de Ministros que, como excepción, el titular «en atención a las características específicas de las funciones de la dirección general, no reúna dicha condición de funcionario, debiendo motivarse». La coalición PSOE-Unidas Podemos acumula ya 25 excepciones, las últimas aprobadas la semana pasada, ya en el marco de la crisis por el coronavirus. El último salvoconducto ha sido para la dirección general de ordenación de juego, dependiente del Ministerio de Consumo. (El Mundo)

El anuncio por parte de Pedro Sánchez de 16.000 millones «no reembolsables» para las comunidades autónomas desató ayer en la reunión informativa del Gobierno un aluvión de demandas sobre los criterios con los que se tienen que repartir dichos fondos. Cada Gobierno autonómico se plantó en la reunión con la ministra María José Montero con una propuesta distinta para distribuir el dinero prometido. Los presidentes de algunas comunidades autónomas llevan días expresando su inquietud ante los gastos extraordinarios, especialmente, el sanitario, pero también otros de carácter social o laboral que van a tener que afrontar por la gestión de la pandemia. (El Mundo)

Coinciden en la imprecisión de la norma y reclaman un decreto aclaratorio. Creen que «la situación extraordinaria derivada del Covid-19» va más allá del estado de alarma. (ABC)

La fase 0 de la desescalada, que se ha calificado como «fantasma», no se inició ayer con buen pie para la mayoría de los sectores del pequeño comercio. Apenas un 3% de los bares y restaurantes abrieron sus puertas, prácticamente los mismos que habían mantenido su actividad repartiendo comidas durante el encierro. El comercio tradicional tampoco se sumó en masa a la desescalada. Sólo tres de cada 10 tiendas atendieron al público, en plena incertidumbre por la desinformación sobre las medidas de seguridad. Las aperturas fueron algo más numerosas en las peluquerías y en las librerías. Según el Gremio de Libreros, alrededor de la mitad levantó la persiana, a pesar de la confusión de sus propietarios y de las dificultades de la cita previa. También el 50% de las peluquerías abrieron las puertas. «Estamos aprendiendo a trabajar», fue el comentario del día. (El Mundo)

El mercado español de automóviles registró en abril 4.163 ventas, un mínimo histórico que, antes del confinamiento, podía alcanzarse en un solo día. Es una imagen que muestra el hundimiento del sector. La caída el mes pasado, con los concesionarios cerrados por el estado de alarma, llegó al 96,5%. Fabricantes y vendedores ya no confían en una pronta recuperación y creen que las matriculaciones bajarán este año entre el 40% y el 45%. Mañana se reúnen con el Gobierno para pedir ayudas urgentes. (El País) (Cinco Días)

La rehabilitación de viviendas y edificios públicos y el impulso a las energías renovables protagonizarán la fase más urgente del plan de recuperación económica que la Comisión Europea tiene previsto aprobar este mes, según el documento de preparación al que ha tenido acceso EL PAÍS. Bruselas espera financiar el plan con un fondo de hasta 1,6 billones de euros y quiere que el relanzamiento después de la pandemia de la Covid-19 se haga con criterios que canalicen las ayudas y los préstamos hacia los proyectos con más visión de futuro desde el punto de vista medioambiental y digital. (El País)

Si hay alguien en la política francesa que domina el arte de la oratoria agresiva es Jean-Luc Mélenchon (Tánger, 68 años). El líder de La Francia Insumisa ha sido, desde que llegó al poder Emmanuel Macron hace casi tres años, una de las voces más críticas —si no la más dura— con el Gobierno y con el presidente, al que hasta hoy acusa de ejercer una “monarquía presidencial”, sin escuchar ni a los suyos. Se ha opuesto prácticamente a cada una de sus políticas y reformas, que si pasaron por el Parlamento fue gracias a la holgada mayoría de la que goza el macronismo, no al apoyo “insumiso” (ni de otros grupos). Algo ha cambiado sin embargo desde el comienzo de la crisis del coronavirus y las difíciles decisiones que ha conllevado. Sin caer en la complacencia, sus maneras se han vuelto más suaves. Mélenchon ha aparcado ese “choque frontal” que reconoce era hasta ahora la marca de la casa “insumisa”. Y ha sido una bajada de tono consciente. (El País)

María Dolores Dancausa, consejera delegada de Bankinter, nacida en Burgos, asegura que nunca ha tenido menos tiempo libre que durante esta pandemia y que echa de menos las reuniones presenciales con sus empleados, a los que ve por videoconferencia. EXPANSIÓN inicia hoy una serie de entrevistas sobre la manera de trabajar de los altos ejecutivos españoles durante estos días. (Expansión)

El mantra de la banca en la crisis pandémica es “somos una ayuda y no un lastre como en la que estalló hace 12 años”. Obras son amores y no buenas razones. Esta vez, las entidades financieras se están portando con el tejido productivo. Al margen de la financiación blindada por el Instituto de Crédito Oficial (ICO), los grandes bancos se han volcado con la liquidez. Los préstamos a empresas europeas a través de créditos sindicados entre el 1 de enero y finales de abril alcanzan los 140.000 millones, según Bloomberg, en línea con la cuantía del mismo periodo de 2019. (Cinco Días)

Sanidad adjudica cinco contratos para garantizar vuelos frecuentes entre Madrid y Shangai y Zhengzhow. (La Razón)

Ximo Puig compra material sanitario a una consultora recién creada y esta no lo entrega. (ABC)