Pueden leerlo en Aciprensa. Emmanuel Macron, de profesión presidente, de devoción masoncete, cierra los templos de Francia por decreto. Los obispos levantan la voz, en lugar de achantarse, y se van a los tribunales contra Macron. Es un resumen muy sucinto, pues ha habido altibajos desde marzo hasta aquí pero el hecho es que los gobiernos europeos también el español, han tomado al coronavirus como excusa para eliminar eucaristías. Si lo quieren en politiqués, para atentar contra la libertad de culto.

Los obispos españoles deberían hacer lo mismo. Callar ante un Gobierno chulesco como el de Pedro Sánchez implica que la bestia se crezca.