Gran escándalo porque las infantas Elena y Cristina se han vacunado en Abu Dabi. Escándalo farisaico, especialidad de la progresía española, con otra reacción lamentable de la Casa Real, tirando piedras contra su propio tejado.

El Rey y Sánchez deberían vacunarse -si tanto creen en las vacunas- como hizo Joe Biden

¿Y qué? Mire usted, el Rey y Sánchez deberían vacunarse -si tanto creen en las vacunas- como hizo Joe Biden. Para dar ejemplo y vencer las reticencias ambientales. Porque todo este falco debate, con el hipócrita de Pablo Iglesias al frente, se enmarca en el proceso pro-III República. Y el primer equívoco a ‘desfacer’ es este: caigamos en la cuenta de que el Sanchismo suspira por la III República con idéntico entusiasmo al que muestra Podemos. No hay dos “terceras repúblicas”: hay sólo una, y sus protagonistas buscan que la III República se parezca a la Segunda: comunista y cristófoba.

Hay que entender que el Sanchismo suspira por la III República con idéntico entusiasmo al de Podemos. No hay dos “terceras repúblicas”: hay sólo una, y se parece mucho a la II República

Y sin olvidar que, en el horizonte republicano, el blanco no es Juan Carlos I, ni Sofía, ni Elena, ni Cristina, ni Urdangarín, ni Froilán: el objetivo es Felipe VI… que es el primero que debería darse cuenta. Bueno, y la heredera, la Princesa de Asturias, Leonor. 

Pero cediendo ante Pedro Sánchez y denigrando a su propia sangre, SM Felipe VI no hace otra cosa que hundirse.