Más muestras de la caradura de Alcoa en España. Ahora tras conocerse las pérdidas que tuvo en 2022 a nivel global por mayores costes (la mayoría debido a reestructuración e impuestos). Y es que a pesar de que tiene paradas las cubas de electrólisis de la planta de San Ciprián (situada en Cervo, Lugo) hasta el 1 de enero de 2024, propone dilatar la reanudación de dicha producción de aluminio primario al 100% hasta octubre de 2025, o sea, ¡21 meses! Eso sí, manteniendo empleos... a cambio de paz social.

El mayor productor estadounidense de aluminio, que ahora está en España bajo la batuta de Miguel Ángel López-Quesada, ha lanzado dicha propuesta al comité de empresa de San Ciprián (la única planta que tiene en España tras haber vendido las de Avilés y La Coruña). Dicha propuesta incluye el anuncio de una inversión adicional de 88 millones de dólares (unos 80,6 millones de euros), que se sumarían a los 103 millones de dólares (unos 94 millones de euros) recogidos en el acuerdo inicial. Eso sí, no hay que olvidar que la multinacional también ha recibido una buena cifra de ayudas públicas en los últimos años en nuestro país.

Alcoa ha señalado que empezaría con la vuelta de producción en las cubas de electrólisis el 1 de enero de 2024, pero lo haría de forma progresiva: tendría al menos 32 cubas operando el 1 de abril de 2024, pero el rearranque de todas no llegaría hasta el 1 de octubre de 2025, cuando la producción mínima sería del 75% de la capacidad total. Durante ese tiempo, funcionarían 32 o el número de cubas que puedan mantenerse con los acuerdos de compra de energía (PPAs), dado que el parón de las mismas se ha decidido por los altos costes de energía. Asimismo, Alcoa se compromete a no iniciar ningún ERE ni ERTE en aluminio español hasta el 31 de diciembre de 2026, a cambio de que los representantes de los trabajadores se comprometan a mantener la paz social al menos hasta esa fecha.