La balanza por cuenta corriente tuvo un déficit de 1.200 millones de euros hasta marzo, frente al déficit de 400 millones del mismo periodo de 2021, a pesar del avance del superávit del turismo, según los datos del Banco de España publicados este martes.

La balanza por cuenta corriente mide los ingresos y pagos al exterior por intercambio de mercancías, servicios, rentas y transferencias.

La causa fue la caída del superávit de la balanza de bienes y servicios, que registró hasta marzo un saldo de 1.200 millones de euros, frente al los 2.300 millones de un año antes.

No obstante, dentro de la balanza de bienes y servicios, ‘turismo y viajes’ registró hasta marzo un superávit de 7.900 millones de euros, muy por encima del saldo positivo de 500 millones de euros del mismo periodo de 2021.

De su lado, la balanza de rentas primaria y secundaria (rentas de trabajo, de la inversión, impuestos sobre producción y la importación y subvenciones) y secundaria (transferencias personales, impuestos corrientes, cotizaciones y prestaciones sociales, etc.) moderó su déficit hasta los 2.400 millones de euros, frente al saldo negativo de 2.700 millones de euros de los tres primeros meses de 2021.

El saldo de la cuenta de capital, por su parte, elevó su superávit hasta marzo hasta los 2.400 millones de euros, frente a los 1.100 millones de euros del mismo periodo del ejercicio anterior.
Así, el saldo agregado de las cuentas corriente y de capital, que determina la capacidad o necesidad de financiación de la economía española, registró un superávit de 1.300 millones de euros hasta marzo, frente al los 700 millones de euros del mismo periodo de 2021.

La cuenta de capital, por su parte, presentó en marzo un superávit de 1.300 millones de euros, casi el doble que en el mismo mes de 2021.

Con todo ello, la economía española registró en el tercer mes del año una capacidad de financiación de 2.500 millones de euros, en contrate con los 2.000 millones de euros que presentaba en marzo de 2021.

Por otro lado, en los tres primeros meses de 2022 España registró salida de capitales por valor de 13.200 millones de euros, frente a la entrada de 23.400 millones de un año antes.