Las bolsas del mundo amanecían planas a la espera de la publicación de la tasa de inflación de la zona euro, la oficina comunitaria de estadística, Eurostat lo ha hecho público: en marzo se ha alcanzado el 2,4%, dos décimas por debajo de la subida del 2,6% de los precios de febrero, siendo la cifra más baja desde el pasado noviembre. 

En el tercer mes de 2024, la caída interanual de los precios de la energía se moderó al 1,8% desde la bajada del 3,7% en febrero, mientras que los alimentos frescos se abarataron un 0,4%, después de subir un 2,1% en febrero. El aumento anual del coste de los servicios se mantuvo en el 4%, y la subida del precio de los bienes industriales no energéticos se atenuó al 1,1%, medio punto porcentual menos que en febrero. De este modo, la tasa de Inflación de la zona euro al descontar el impacto de la energía fue del 2,9%, frente al 3,3% de febrero, y cuando excluimos también los alimentos, el alcohol y el tabaco, la tasa subyacente baja al 2,9% desde el 3,1%.

Entre los países del euro, las mayores tasas de Inflación en marzo se observaron en Croacia (4,9%), Austria (4,2%) y Estonia (4,1%), mientras que las menores subidas de precios correspondieron a Lituania (0,3%), Finlandia (0,7%) y Letonia (1%).

Pero cuidado, porque España ha sido el país que ha registrado la mayor subida de los precios entre las grandes economías del euro, situando la tasa en marzo en el 3,2%, frente al 2,9% de febrero, lo que supone un repunte de nada más y nada menos que ocho décimas. 

Sobre la mesa la opinión de los expertos: ya toca una relajación en la política monetaria, algo que no parece que vaya a suceder, ni está previsto, y el la unos datos de inflación estadounidenses bastante menores de lo esperado, no ha hecho más que reforzar la postura de la Reserva Federal (Fed), a lo que hay que sumar las declaraciones de su presidente Jerome Powell, quien insistió en que no tienen prisa por empezar a recortar los tipos de interés

Muestra de ello es el precio alcanzado esta semana por el oro, invertir en el metal suele ser una idea que al inversior le surge cuando ve la cosa mal e incierta, usando el oro como valor refugio, y éste se ha disparado, especialmente en el último mes. Este lunes alcanzaba su octavo récord en 16 meses, con una cotización de 2.265 dólares la onza (unos 2.099 euros, al cambio actual).