Ebro Foods (dueño de SOS, Brillante, La Fallera, Garofalo y Bertagni, entre otras marcas alimentarias) ‘se ha atragantado’ un poco en el primer semestre, aunque más por razones externas que internas. Y es que ha bajado ingresos por la reducción de los precios al consumidor, tras el abaratamiento de las materias primas, y ha ganado un 10,9% menos por el impacto de las divisas, la subida de los tipos de interés y el aumento de los impuestos de una liquidación societaria.

El líder mundial en arroz y segundo fabricante de pasta ha tenido unos ingresos de 1.533,4 millones de euros, lo que supone un 3% menos que hace un año cuando la cifra fue de 1.580 millones, debido a los menores precios al consumidor por el abaratamiento de las materias primas. Arroz ha tenido un buen comportamiento en todas sus marcas, registrando unas ventas de 1.187,2 millones (-1,8%) por los menores precios; y pasta ha tenido unas ventas estables de 347,1 millones (-0,1%).

Por su parte, el beneficio bruto de explotación (ebitda) ha logrado un nuevo récord, al ascender un 1,1% y alcanzar los 212,9 millones. Arroz ha contribuido con 169,9 millones (+3,3%) y pasta con 51,8 millones (-5%). Por tanto, la rentabilidad sigue al alza, algo que siempre es una buena noticia. 

Claro que el beneficio neto ha bajado un 10,9%, a 97 millones, debido a factores externos: el impacto del tipo de cambio, los mayores intereses tras la refinanciación de la deuda y un aumento impositivo. Eso sí, la deuda neta ha aumentado, pasando de los 572,54 millones del primer semestre de 2024 a los 675,8 millones, debido a una inversión capex (en activos a largo plazo) de 66,3 millones y al pago de dividendos y el devengo de otro anterior por 110,1 millones.

El grupo alimentario que tiene como presidente ejecutivo a Antonio Hernández Callejas ha referido que, tras una “buena campaña” de siembra de arroz en España, esperan que sea la mejor de los últimos cuatro años y también tienen un adecuado nivel de stocks, aunque prevén una bajada sustancial de precios. Eso sí, ha insistido en pedir protección para el sector arrocero en Europa y que la Unión Europea endurezca los aranceles a los países EBA (también denominados Países Menos Adelantados -PMA-, que no tienen ningún arancel). Y en el negocio de la pasta, esperan “mayor complejidad”, en especial en la fresca por la inflación de sus materias primas (en el huevo por la gripe aviar y en los lácteos) y las temperaturas elevadas. Además, las marcas Garofalo y Bertagni afrontan un contexto “difícil” en EEUU por los aranceles y la depreciación del dólar.

Ebro Foods está controlado por la familia Hernández, dueña del 15,922% del capital, repartido a partes iguales (del 7,961%) entre dos ramas a través de las sociedades Hercalianz Investing Group y Grupo Tradifin. Le siguen: Corporación Financiera Alba, el vehículo de inversión de los March, con el 14,004%; Damm, con un 11,686%; la SEPI con un 10,36%; y algunos empresarios que fueron embotelladores de Coca-Cola (Empresas Comerciales e Industriales Valencianas S.L., la sociedad de los Gómez-Trenor, con un 7,827%; y José Ignacio Comenge Sánchez-Real, con un 5,2%). De cara al segundo semestre, estima que será “muy competitivo porque el mercado internacional registra precios históricamente bajos tanto en Asia como en Sudamérica” y al mismo tiempo, hay que lidiar con la “inestabilidad geopolítica” y la “incertidumbre” de los aranceles.