Cae la compraventa de viviendas tanto nuevas como usadas
La venta de viviendas vuelve a bajar en abril, con un descenso del 8,1% respecto al año anterior, registrándose la firma de 43.311 transacciones, según ha informado el Instituto Nacional de Estadística (INE). En tasa intermensual (abril sobre marzo), la compraventa de viviendas subió un 22,4%, su mayor caída en un mes de abril desde 2020, nada más declararse la pandemia.
Con este retroceso interanual, la compraventa de viviendas encadena tres meses de tasas negativas. Aunque no debemos olvidar que la racha positiva ya se rompió en diciembre, cuando la compraventa disminuyó un 10,2%, desde ese mes, sólo en enero se han registrado tasas positivas. Es más, el número de transacciones es el más bajo en dos años.
Esta caída la vienen anunciando todos los expertos: los notarios llevan alertando varios meses, a lo que hay que añadir el estancamiento en el precio de las transacciones, y es que el sector inmobiliario atraviesa un momento de incertidumbre en el que la firma de hipotecas también se ha visto afectada con un desplome del 15,7% en marzo, encadenando también dos meses en tasas negativas.
Cae la compraventa de viviendas tanto nuevas como usadas. Así, la compraventa de viviendas usadas bajó un 9% en el cuarto mes del año, hasta sumar 35.057 operaciones, mientras que las transacciones realizadas sobre pisos nuevos disminuyeron un 4,2%, hasta las 8.254 operaciones.
El 91,9% de las viviendas transmitidas por compraventa en abril fueron viviendas libres y el 8,1%, protegidas. En total, la compraventa de viviendas libres bajó un 8,5% interanual, hasta las 39.809 operaciones, en tanto que la compraventa de viviendas protegidas retrocedió un 3,6%, hasta sumar 3.502 transacciones.
Todo ello, sin perder de vista que los tipos de interés y la okupación están destruyendo el mercado inmobiliario. Los tipos de interés al alza, una medida buena de suyo, y el euribor disparado, encarecen las hipotecas y mucha gente se retrae de la compra de vivienda, una de las claves de la economía española, a lo que hay que sumar la aprobación de la Ley de Vivienda, que traerá una fuerte intervención en el mercado.