Cajamar ganó 263 millones de euros durante los nueve primeros meses del año, un 6,9% más que el año anterior, según las cuentas publicadas este miércoles por la entidad. Lo más destacable, no obstante, fue la caída del 12,5% del margen de intereses, que no superó los 810 millones de euros.
Sí, la entidad que preside Eduardo Baamonde sufre excesivamente cuando el BCE baja los tipos de interés oficiales. Lo estamos viendo a lo largo de este ejercicio: en el primer semestre la caída fue del 11,9%, hasta los 540,6 millones.
Bajó el margen, pero las comisiones subieron un 7,5% y alcanzaron los 247,9 millones de euros. El margen bruto, por su parte, aumentó un 3,8%, hasta los 1.239 millones.
Otra partida que conviene seguir de cerca es la de los gastos. También aumentaron, concretamente, un 2,6% los de personal (318,2 millones de euros) y un 3,2%, hasta los 179,3 millones, los de administración.
Al final, una de las claves fue la reducción, nada menos que del 60,6%, de las dotaciones a provisiones, que fueron de 74,7 millones de euros. Las pérdidas por deterioro de activos financieros, sin embargo, aumentaron un 36,6% y alcanzaron los 196,8 millones de euros.
Lo mejor del periodo, en cualquier caso, fue el impulso de la actividad comercial, con un aumento del 10,6% de la inversión crediticia. Cajamar cerró septiembre con un volumen de negocio gestionado de 109.622 millones de euros y unos activos totales de 63.364 millones, un 3,6% superiores a los del mismo mes de 2024. Cajamar tiene 3,9 millones de clientes, un 2,4% más que hace un año.











