El Sabadell es la entidad que más dinero ha recibido del Fondo de Garantía de Depósitos (FGD) durante la crisis. Hablamos, concretamente, de 23.217 millones de euros, destinados para el saneamiento de la CAM, entidad que adquirió en diciembre de 2011 tras el abandono de los demás pretendientes que acudieron a la puja.

El BBVA es el segundo más agraciado: ha recibido 6.993 millones de euros, repartidos entre Unnim (5.963 millones) y Catalunya Banc (1.030 millones). Completa el ranking Abanca, que se adjudicó NCG Banco por 1.003 millones de euros. El banco gallego ha recibido 826 millones del FGD.

Sobre el papel, ese dinero salió del Fondo de Garantía de Depósitos (FGD). En la práctica, ha salido del bolsillo de Juan Español

Sobre el papel, son aportaciones de los bancos, es decir, no es dinero público, y su objetivo es asegurar hasta 100.000 euros por titular y cuenta, en caso de que un banco caiga. Esa es la teoría, que todo lo aguanta, como el papel. Con la crisis, sin embargo, ha quedado demostrado que las aportaciones que las entidades han ido realizando al FGD han sido claramente insuficientes. Un ejemplo: solo el rescate de CCM en 2009 consumió los 2.475 millones de euros del FGD, recaudados durante años.

Las necesidades del FGD no han hecho más que aumentar durante los últimos años. Unas necesidades que no ha podido satisfacer directamente, por lo que ha tenido que ser el FROB, o sea, el Estado, o sea, el contribuyente, el que ha tenido que adelantar el dinero. Sí, el FGD lo irá devolviendo con los años, pero el que, de momento, ha puesto el dinero, ha sido Juan Español, como siempre o casi siempre.

Y no es poco: 31.166 millones de euros al cierre de 2018. Una cantidad que podría aumentar, dependiendo de los Esquemas de Protección de Activos (EPAs) que siguen vigentes. El de la CAM, por ejemplo, no finaliza hasta 2021.