Esta foto no ayuda mucho a la monarquía. A lo mejor, Felipe VI no tenía que acudir a la toma de posesión de Luis Arce, donde Rodríguez Zapatero y Pablo Iglesias han liderado un aquelarre que define los golpes de Estado de ultraderecha como el mayor peligro para Hispanoamérica y para el mundo.

Y esto es un país como Bolivia, donde un tirano oligofrénico, ligeramente encocado, de nombre Evo Morales, ha conseguido lo que los neocom persiguen en España y en otros países: tomar el poder por las urnas, democráticamente, para luego eternizarse en el poder.  

Por eso han montado el numerito de rodear al Rey de España con dos chiflados puño en alto, mientras ZP e Iglesias elaboraban una doctrina realmente majadera, a mayor gloria de Evo Morales. Felipe VI ha dejado que su padre sea presa de los buitres así que tampoco puede acudir a la toma de posesión del presidente de Bolivia.

Así que acude a ver al títere de Evo Morales, con Pablo Iglesias, cuyo principal objetivo es acabar con la monarquía española, la III República, en vista a esa cuarta internacional comunista, esta vez creada desde el Occidente democrático.