Repsol ha publicado este jueves sus resultados a nivel consolidado del primer trimestre de 2021, un periodo en el que el grupo ha superado todas las expectativas. Grandísimas noticias, nos gustan los hidrocarburos (y seguirán siendo importantes). No nos entiendan mal preferimos no contaminar pero tanta energía verde ya se hace muy pesada, más aún cuando nuestros “dirigentes” no creen en ella y sólo se fomenta con fines políticos, y si se tiene en cuenta que descarbonización no sólo es electrificación. La situación en bolsa de la compañía multienergética que preside Antonio Brufau y tiene como CEO a Josu Jon Imaz tras la publicación de sus resultados es la siguiente: después del significativo aumento de la cotización en un 2,29% el pasado miércoles, situándose en los 10,26 euros, el precio de la acción de Repsol ha amanecido este jueves en la apertura en 10,41 euros, lo que supone un incremento de 0,15 euros intradía en términos absolutos y un 1,46% en términos relativos, aunque ha cerrado la sesión con un descenso del 1,05%.

El resultado neto del grupo en el primer trimestre de 2021 ha sido superior en 1.135 millones de euros (M€) al del mismo periodo del año pasado, lo que significa un incremento porcentual incalculable, ya que Repsol ha pasado de tener un resultado neto negativo de 487M€ a un resultado neto positivo de 648M€. Pero bueno, vamos a explicarlo todo, el resultado neto del primer trimestre de 2020 vino afectado principalmente por un reconocimiento negativo en la partida de efecto patrimonial de 790M€, lo que fue imposible de sostener cuando su resultado de explotación era únicamente de 663M€. El efecto patrimonial incluye ajustes del grupo sobre las existencias. Nosotros preferimos atender al resultado neto ajustado, que excluye dichos conceptos y, que dadas las cifras anteriores, parece más coherente a efectos comparativos entre períodos. El resultado neto ajustado de Repsol del primer trimestre de 2021 ha sido superior en un 5,4% al del mismo periodo del año anterior, pasando de 447M€ a 471M€.

El resultado neto ajustado de Repsol del primer trimestre ha sido superior en un 5,4% al del mismo periodo del año anterior, pasando de 447M€ a 471M€

La facturación, ingresos, del grupo en este primer trimestre ha descendido en un 4,8% respecto al primer trimestre de 2020, pasando de 11.132M€ a 10.592M€. Pese a ello, como ya adelantábamos, este impacto en su cifra de ventas no se ha visto reflejado en el resultado del grupo, de manera comparativa con el año anterior.

Vayamos ahora con la capacidad de generar recursos medida a través del indicador Ebitda, que es de los más bonito que hemos visto en los últimos tiempos en lo que al análisis de los grupos empresariales se refiere, aunque tampoco vayamos a exagerar. Repsol ha obtenido un Ebitda de 1.837M€ en el trimestre, un 426,3% superior al de hace un año, es decir, ha mejorado sobremanera su capacidad para generar recursos. El principal incremento entre períodos de esta cifra se debe a, entre otras cosas, que el Ebitda del segmento industrial (en el que están incluidas sus refinerías españolas) ha pasado de ser negativo de 514M€ en el primer trimestre de 2020 a ser positivo en 708M€ en el mismo periodo de este año.

El Ebitda se dispara un 46% y se debe a, entre otras cosas, que el Ebitda del segmento industrial ha pasado de ser negativo de 514M€ a ser positivo en 708M€

Finalmente, toca tratar de manera breve un análisis de la deuda del grupo. La deuda neta de Repsol en el primer trimestre ha ascendido hasta los 6.452M€, 326M€ menos que la deuda a cierre de 2020. Sin embargo, el grupo refleja que si se excluye el efecto neto de los 340M€ procedentes de bonos subordinados emitidos y recomprados entre enero y febrero, la deuda neta ha permanecido prácticamente inalterada desde el cierre del año pasado.

Conclusión sobre los resultados: la cifra de ingresos de Repsol ha sufrido un leve descenso en el primer trimestre. Si bien, esto ha sido compensando por la excelente gestión de sus recursos viendo su buen hacer reflejado en la variación interanual positiva del Ebitda (+426%) y en el incremento del resultado neto ajustado en un 5,4%.

Imaz no descarta que se combine la salida a bolsa con la incorporación de un socio en su negocio de Renovables y barajará la entrada de un socio en el área de Clientes si encuentra uno que añada valor

Paralelamente, en la conferencia con analistas, Imaz no ha descartado que se combine la salida a bolsa con la incorporación de un socio en su negocio de Renovables, aunque todavía tiene un plazo de 13 meses para decidir, así que “no se tiene prisa”, y ha subrayado que no tienen pensado desinvertir. Asimismo, se barajará la entrada de un socio en el área de Clientes si encuentra un socio que añada valor. Además, ha elevado un 10% la previsión del Ebitda ajustado anual hasta los 5.800M€ y estima que la deuda cerrará en unos 6.800M€, un nivel similar al de 2020. 

Tras la última multa de la CNMC, que Repsol recurrirá, ha recibido una alegría desde fuera de España: un laudo parcial favorable donde el Tribunal Arbitral ha rechazado tres de las cuatro demandas pendientes en su litigio con la china Sinopec por la compra del 49% de Talisman Energy en 2012. Esto reduce el riesgo inicialmente contabilizado: en febrero de 2020, Repsol provisionó 837M€ tras recibir un laudo arbitral parcial en contra y después de que analice el último laudo recibido, podría revisar dicha provisión y reducirla.