El plazo dado por el Gobierno de Pedro Sánchez al Ejecutivo del PP y Ciudadanos de la Región de Murcia para que retire el 'pin parental', que fue implantado a propuesta de Vox a principios de curso, concluye este lunes, recuerda RTVE.

La Consejería de Educación y Cultura de Murcia ya ha anunciado que no atenderá al requerimiento remitido hace un mes por el Ministerio que dirige Isabel Celaá, por lo que el Ejecutivo central recurrirá a la vía judicial.

Efectivamente, la ministra de Educación ha asegurado este lunes que "mañana mismo" pedirá ante los tribunales la suspensión cautelar de la medida. "Aún tiene estas 24 horas para reponer la legalidad", ha afirmado doña Isabel, adelantándose a la decisión de la Justicia. "De no ser así, mañana mismo recurriremos por la vía contencioso-administrativa ante el Tribunal Superior de Justicia de Murcia", ha señalado.

Por su parte, el presidente de la Región de Murcia, Fernando López Miras, afirmó el pasado viernes que solo retirará el 'pin parental' si así lo determinan las instancias judiciales.

La mejor forma de asegurar la libertad de educación es el cheque escolar

Según explica Vox en su web, el pin parental es una solicitud que va dirigida a los directores de los centros educativos en los que estudian nuestros hijos, con tal instancia solicitamos a la dirección que nos informe previamente, a través de una autorización expresa sobre cualquier materia, charla, taller o actividad que afecte a cuestiones morales socialmente controvertidas o sobre la sexualidad, que puedan resultar intrusivos para la conciencia y la intimidad de nuestros hijos, de tal modo que como padre o madre pueda conocerlas y analizarlas de antemano, reflexionar sobre ellas y en base a ello dar mi consentimiento o no, para que nuestro hijo asista a dicha formación.

Aunque la mejor forma de asegurar la libertad de educación es el cheque escolar. ¿En qué consiste el cheque escolar? Los padres recibirían del Gobierno un bono por un importe equivalente al coste medio de un puesto escolar en un centro público para que decidan libremente a qué colegio, público o privado, quieren llevar a sus hijos, a imagen y semejanza de lo que han hecho otros países, como, por ejemplo, Suecia, explicó Libre Mercado.