El saldo positivo por cuenta corriente registró 200 millones de euros entre enero y julio de 2018, frente a los 6.700 millones que obtuvo en el mismo periodo del año anterior, lo que supone un descenso del 97%, según datos publicados este viernes por el Banco de España.

En concreto, la balanza de bienes y servicios alcanzó un saldo positivo de 13.300 millones de euros, inferior a los 19.700 millones que presentó en el mismo periodo del año anterior. O sea, un 32,5% menos. Entre los bienes y servicios, turismo y viajes aumentaron en 100 millones su superávit y alcanzaron los 23.300 millones hasta julio.

Por su parte, la balanza de rentas primaria (rentas de trabajo, de la inversión, impuestos sobre producción y la importación y subvenciones) y secundaria  (transferencias personales, impuestos corrientes, cotizaciones y prestaciones sociales, etc.) registró un déficit de 13.100 millones de euros hasta julio, superior a los 13.000 millones de los siete primeros meses de 2017.

La balanza por cuenta corriente mide los ingresos y pagos al exterior por intercambio de mercancías, servicios, rentas y transferencias

El saldo de la cuenta de capital mostró hasta julio un superávit de 1.600 millones de euros, 400 millones por encima del mismo periodo de 2017. Así, el saldo agregado de las cuentas corriente y de capital, que determina la capacidad o necesidad de financiación de la economía española, registró un superávit de 1.800 millones de euros, frente al saldo positivo de 7.900 millones del mismo periodo del año anterior.

Por otro lado, en los siete primeros meses del año salieron de España 30.900 millones de euros por compra de activos, desendeudamiento y desinversiones, por debajo de los 47.000 millones que salieron del país en el mismo periodo de 2017.