Aumentar la rentabilidad por encima del coste de capital. Ese es uno de los mayores retos que afronta la banca española desde hace meses. No ayuda, desde luego, la política monetaria del Banco Central Europeo (BCE), que mantiene negativos los tipos de interés. Lo dicen las propias entidades, que esperan como agua de mayo una subida, aunque sea mínima, de los tipos.

Pero no se precipiten: la culpa de que el negocio bancario ya no sea negocio no es del BCE, según Pablo Hernández de Cos, que este miércoles ha participado en un encuentro del sector financiero organizado por el IESE y EY. Efectivamente, el gobernador del Banco de España, al contrario, ha defendido las decisiones de Mario Draghi porque han tenido un efecto muy positivo en la actividad económica europea.

Hernández de Cos advierte a la banca que tenga cuidado con el crédito al consumo y con otros préstamos a más largo plazo

Así las cosas, los bancos deben buscar vías alternativas de ingresos. Pero Hernández de Cos tampoco se lo pone fácil y ya les ha advertido que tengan un especial cuidado con el crédito al consumo y con otros préstamos a más largo plazo. Entonces, ¿qué nos queda, además de la gestión de activos fuera de balance? La reducción de costes, es decir, un mayor ajuste de las plantillas.

Por cierto, el propio gobernador, tras advertir del crecimiento del crédito ha negado que estemos, si quiera, en la antesala de una nueva burbuja inmobiliaria. Todos los índices -número de hipotecas, precio de la vivienda y el peso de la construcción en el conjunto de la economía española- siguen estando muy por debajo de los registros pre-crisis.