El desastre de la vicepresidenta cuarta y ministra de Transición Ecológica y Reto Demográfico, Teresa Ribera, que ha sido desautorizada recientemente, va en aumento. Y es que este jueves, se ha conocido que el déficit eléctrico se ha quintuplicado, según los últimos datos de la CNMC,… y aún está pendiente el déficit de tarifa acumulado, la pesada herencia que dejó José Luis Rodríguez Zapatero y que cerró 2019 en 16.602 millones de euros (llegó a alcanzar casi los 30.000 millones).

El déficit eléctrico provisional se ha situado en 1.202 millones en la décimo cuarta liquidación de 2019 (en cada ejercicio hay 14 acumulativas a cuenta y al final de año se publicará la del cierre de 2019), cinco veces superior al de 243 millones registrado en la misma liquidación en 2018. Este déficit ha superado en 1.218 millones el resultado que se esperaba (un superávit de 15,9 millones) porque los ingresos procedentes de la aplicación de la Ley 15/2012 y los derivados de las subastas de derechos de emisión han resultado inferiores a los previstos para el ejercicio. 

El déficit de tarifa cerró 2019 en 16.602 millones y la deuda acumulada del sistema gasista se situó en unos 1.000 millones al cierre de 2018

La CNMC también ha dado a conocer los datos de la segunda liquidación de 2020, donde el déficit eléctrico provisional ha sido de 965 millones. Y ojo, porque Ribera tiene previsto reanudar las subastas de renovables y es partidaria de que la recuperación ante la crisis provocada por el coronavirus tiene que ser verde.

Por su parte, la situación del sistema gasista es bien distinta. En la décimo cuarta liquidación de 2019, el superávit se multiplicó por 12, pasando de 30 millones a 354 millones; y en la segunda liquidación de este año, se ha registrado un déficit de 155 millones, algo inferior al de un año antes (-169 millones). Además, a este se sumaría la deuda acumulada del sistema gasista, que cerró 2018 en unos 1.000 millones.