A Pablo Echenique, portavoz parlamentario de Podemos, le gusta recordarnos que es científico. Como si esa condición no sirviera para mentir. Y así, en la mañana del miércoles, en el Congreso, ha dicho que España es el séptimo país del mundo por número de contagiados por millón de habitantes, cuando todo el mundo ya dice que somos el primero por este concepto y el segundo del mundo por fallecidos por millón (y eso contando a Bélgica, que tiene un sistema de cómputo distinto al resto… y probablemente más acertado).

Y no le falta razón a don Pablo, porque en los rankings que se hacen desde distintas fuentes y que Hispanidad ha venido publicando, en aquellos que dan a España la desgraciada medalla de oro de ser el epicentro mundial del coronavirus, se están despreciando los datos de los pequeños países.

La monumental mentira del Ejecutivo y de sus socios podemitas trata de ocultar una verdad cada vez más inocultable: el brutal fracaso de Pedro Sánchez frente al Covid-19

Ante el recordatorio de Echenique, quien consideraba que España, gracias al gobierno socio-podemita, por supuesto, no era, ni mucho menos, el país más afectado por el Covid-19, en Hispanidad nos hemos tomado la molestia de hacer el ranking de los diez primeros países del mundo, con independencia del tamaño de su población (ver cuadro).

Cuadro grande miércoles 20 mayo

Y el resultado es que lleva usted razón, señor Echenique, España no es el país con más infectados del mundo, es el sexto. Y no es el segundo país con más fallecidos por millón de habitantes del mundo, es el cuarto.

Ahora bien, grandísimo embustero, resulta que el país con más contagiados y fallecidos por millón del mundo es San Marino (34.000 habitantes) y entre los diez países con más contagiados del mundo sólo hay dos con más de seis millones de habitantes (España y Bélgica), hay cuatro con más de uno y menos de seis millones de habitantes y sólo cuatro con menos de un millón de habitantes.

En toda la historia de la democracia española se había defendido y difundido un embuste tan grueso como el actual, cuyo saldo real de muertos ya se aproxima a los 50.000

Vistas así las cosas, creemos que la comparativa elegida por Echenique no sale bien ni tan siquiera para sus intereses, si se entra en el detalle. Que sólo empeoren nuestros datos países minúsculos desde un punto de vista poblacional, no es para sentirse orgulloso. Ni siquiera su odiado EE.UU nos supera, aunque no entra en esta tabla porque no le corresponde. Pero una vez que nos centramos en estos diez países, las cosas son peor aún: cuartos en número de fallecidos por millón y segundos en fallecidos por contagiado (detrás, como no, de Bélgica, por la razón antedicha).

El señor Echenique es un científico pero un poco mentiroso. El conocimiento de los datos lo usa no para encontrar la verdad, sino para engañar a los votantes. ¡Qué bien que existan pequeños países como San Marino, Andorra, Islandia o Luxemburgo -que todos juntos suman apenas un millón de habitantes- para sacar pecho! O países como Catar, Singapur, Irlanda y Barhein, que todos juntos apenas suman 1/3 de la población de España para alardear de nuestras cifras.

Echenique hoy se ha sentido como el primo de Zumosol arreando a los enclenques que lo hacen peor que España. Una colaboración más en la gran estafa del Gobierno Sánchez, quien nos repite, hoy nuevamente, otra vez, que el confinamiento que ha acabado con la libertad y con la economía españoles constituye un éxito del Gobierno.

Pero la culpa de todo la tiene la madrileña, y pepera, Isabel Díaz Ayuso, que conste

Por cierto, en el mundo hay 194 países: ¿Se siente orgulloso Echenique porque España sea el sexto o séptimo más afectado? Menos mal que es un científico.

Es la monumental estafa de Moncloa por ocultar su criminal fracaso con el coronavirus. Mejor sería contemplar las veces que España (ver cuadro) multiplica la media mundial de infectados por habitante en 7,71 y, lo que es más grave, multiplica esa misma media por 14,68 (ver cuadro) cuando se compara el número de fallecidos por habitante.

Cuadro pequeño miércoles 20 mayo

En toda la historia de la democracia española se había defendido y difundido un embuste tan grueso como el actual, cuyo saldo real de muertos en España por el coronavirus no son los 28.000 del Gobierno sino que ya se aproximan a los 50.000.

Y la culpa la tiene la madrileña, y pepera, Isabel Díaz Ayuso, que conste. Por ejemplo, en el mismo debate donde el Gobierno pedía a la oposición que le aprobara un prórroga más del estado de alarma, la izquierda cargaba contra la pepera madrileña Isabel Díaz Ayuso. Ahora bien, campeones, recordad que un estado de alarma signifca, precisamente, que todo el poder y toda la responsabilidad pasan al presidente del Gobierno. Es decir, si Madrid ha fracasado (o Barcelona, o Canarias, o Galicia...) el que ha fracasado es Sánchez, no Ayuso. 

¡Qué cara más dura tienes Echenique!