Este jueves, Cani Fernández, candidata a presidir la CNMC, ha comparecido ante la Comisión de Asuntos Económicos y Transformación Digital del Congreso con los propuestos para cubrir el resto de vacantes del regulador (Ángel Torres, Carlos Aguilar, Josep Maria Salas y Pilar Sánchez), y ha destacado su insistencia en que su propósito es sólo uno: “Máxima independencia de la CNMC”. Y lo dice quien defendía a los monopolios en el bufete Cuatrecasas. 

El Congreso ha respaldado las cinco candidaturas, al no apreciar conflicto de intereses ni veto, excepto PP y Vox, y Cs que se ha abstenido en tres ocasiones (las referidas a Torres, Salas y Sánchez). Fernández ha presumido de llevar 33 años de trayectoria profesional dedicada al Derecho de la Competencia… en distintas partes (incluso en la docencia)… materia de la que “me enamoré” a los 18 años. Aunque ha anunciado que se inhibirá en asuntos con los que haya podido estar relacionada, optando por la abstención, pero no ha dicho ni mú de su último puesto en Presidencia del Gobierno hasta el momento en que ha respondido a las preguntas. Eso sí, la mayoría de diputados han destacado su excelente currículum.

“Nunca se producirá un conflicto de intereses”, subraya Cani Fernández

Desde PNV se ha subrayado el concepto de la independencia en el ejercicio del cargo y no tienen dudas sobre Fernández, al contrario que Cs, que también ha criticado el encorsetado formato del procedimiento (candidatos que propone el Gobierno). En la sala ha habido un gracioso baile de sillas, cuando el diputado de ERC se ha cambiado para que Fernández viera mejor a Cs, algo que puede parecer una metáfora del baile de cargos que ha tenido la candidata en los últimos cinco meses y que le ha recordado el PP: del sector privado al público, y ahora postula a presidir la CNMC. Cómo no, desde el PSOE se ha alabado el “compromiso” de Cani Fernández frente a una vida menos expuesta.

La candidata ha presumido de que en todos sus trabajos se ha regido por “independencia de criterio”, que también será su guía al frente de la CNMC. Asimismo, ha subrayado que “nunca se producirá un conflicto de intereses”. Y ha contestado que tenía excedencia en Cuatrecasas y no cobraba emolumentos de este despacho desde febrero, cuando pasó a Presidencia del Gobierno para un puesto al que se incorporó el 2 marzo y una tarea que no ha podido hacer por el coronavirus.

Además, ha afirmado: “No conozco a Paolo Vasile, no he hablado nunca con él, aunque he asesorado a Mediaset”. ¿Comprenden? El primer ejecutivo de Mediaset, en la operación más importante de su carrera, la fusión Tele 5-Cuatro, contrata al bufete Cuatrecasas y la responsable del proceso en Cuatrecasas, Cani Fernández, que de competencia hablamos, y en un proceso que duró meses, ni tan siquiera le conoce. 

Y ese 'desconocido', miren por dónde, es quien aconseja a Iván Redondo, jefe del Gabente de Presidencia en Moncloa, que el sustituto de José María Marín Quemada al frente de la CNMC sea su antigua asesora, a quien no conoce. Estadísticamene todo es posible, como bien sabe el doctor Fernando Simón, pero la cuestión de fondo no es si Cani y Paolo, Paolo y Cani, son íntimos amigos o perfectos desconocidos, sino qué pinta la especialista en monopolios -en defender a los presuntos monopolios- de un mulitmillonario despacho de abogados en la Presidencia del defensor de la libre competencia. Moncloa, ¿es que no había alguien más? 

Concluyendo: el PSOE se ha cargado la independencia del regulador de la libre concurrencia.  nsistimos, con Fernández, en la CNMC mandará el italiano Paolo Vasile. El gobierno socio-podemita prosigue la toma de las instituciones públicas.