En la vía penal que se sigue en la Audiencia Nacional por la intervención del Banco Popular, ha comparecido ante el juez el presidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Sebastián Albella.

Para centrarnos, el caso judicial del Banco Popular tiene como eje nuclear la ampliación de capital de 2016, por nada menos que 2.500 millones de euros. Porque esa ampliación tuvo lugar doce meses antes de que la JUR europea, en una operación en verdad oscura, decidiera intervenir el Popular y regalar al Santander por un euro, un banco que valía en bolsa 1.300 millones de euros.

Y por cierto, Albella está acusando a los consejeros de un banco que, en esa misma ampliación perdieron un total de 500 millones de euros. Al parecer, Linklaters cobró la minuta con la satisfacción del deber cumplido.

A Albella le costó reconocer ante el juez Calama que el Popular era solvente y se acogió a la ‘falta de liquidez’

Resulta que el despacho de abogados Linklaters, que dirigía Sebastián Albella, realizó el informe jurídico de la ampliación, que firmara con sobresaliente. Es más, Ángel Ron, entonces presidente del banco, invitó a Albella al Consejo de la entidad donde el hoy presidente de la CNVM se deshizo en elogios sobre la operación.

Dos años después, uno tras la intervención del Popular, Albella, ya presidente de la CNVM, habló de dudas sobre las cuentas del Popular, cuando sabe que lo que se juzga de un gestor es que, en esa ampliación de capital o en las cuentas anuales, responda a la realidad.

Hoy, a Albella le costó reconocer ante el juez Calama que el Popular era solvente y se acogió a la ‘falta de liquidez’.

Desde la CNMV se han lanzado sospechas sobre las cuentas del Popu. En su día, Albella felicitó al Consejo por la trascendental ampliación de capital de 2.500 millones de euros

Por tanto, hay dos sebastianes albellas. El primero es el que en 2016 era socio director del bufete Linklaters. El otro es el de hoy jueves 17 de septiembre, ya presidente de la CNMV, que comparece en la Audiencia Nacional. Hoy, ante el juez José Luis Calama, Albella ha dicho que no se enteró de la petición de informe jurídico del Popular (¿De verdad, no se enteró del encargo de un análisis de una ampliación de 2.500 millones de euros? ¿En serio? ¿A qué dedicaba sus horas de trabajo en Linklaters?) hasta que se lo comentaron en una reunión interna del despacho.

Es más, el presidente de la CNMV ha asegurado al juez que el informe de Linklaters sobre la ampliación de capital fue cosa de su subordinado, Jorge Alegre, descargando en este la responsabilidad de lo ocurrido. Pero fue él, no Alegre, quien felicitó a los vocales del Consejo del Popular que son los hoy encausados.

Y ahora la pregunta: ¿puede un personaje como Sebastián Albella repetir como presidente de la CNVM? Pues está en ello y a lo mejor Pedro Sánchez se lo compra. Este perfil le agrada al señor presidente del Gobierno.