El 9 de marzo de 2016, la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, comunicó a los militares que se acercaron a saludarla en el Salón de la Enseñanza, que se celebra habitualmente en Barcelona, que no deseaba que estuvieran en el certamen «por lo de separar espacios», ha dicho.

Ada Colau mostró su descontento a los militares presentes en el Salón de la Enseñanza por su estand, ya que desde el Ayuntamiento manifestaron su incomodidad por la presencia del Ejército en un espacio educativo, algo habitual hasta ahora porque se ofrece como una salida formativa y laboral a los estudiantes.

Pues bien, como la centrífuga mente de la alcaldesa de Barcelona no para de dar vueltas y vueltas hasta sorprendernos con innovadoras propuestas, ahí va la última. En los últimos meses el consistorio ha impartido talleres de okupación dirigidos a los jóvenes de la ciudad. Bajo el título ‘taller de liberación de espacios’ se instruía a los asistentes sobre las «teorías anarquistas» que defienden este tipo de apropiaciones ilegales.

El pasado mes de mayo, uno de los centros juveniles dependientes del consistorio albergó una formación que invitaba a los jóvenes a acudir para «acercarse a las teorías anarquistas que hablan de la liberación de espacios como modelo de sostenibilidad tanto en vivienda como en urbanismo y espacios para la comunidad».

La liberación de espacios tiene como fin cuestionar la propiedad y las formas tradicionales de participación social. Según la descripción que puede leerse en ciertos artículos relacionados con la materia, persigue el objetivo de «poner esos espacios al servicio de las necesidades del pueblo».

Otra de sus bases es la denominada «autogestión» que implica a todos los miembros que convivan en el espacio okupado de manera ilegal y que persigue «beneficiar a los participantes del lugar de la misma manera», tal y como sostienen sus teorías. Para los defensores de esta práctica, la okupación es una reivindicación que consigue igualar a la sociedad e impedir que los «buitres especuladores» consigan sus propósitos.

La página web que recoge la convocatoria no detalla más información sobre el contenido que tuvo el taller y tampoco quién fue el encargado de impartirlo.

La Ciudad Condal es una de las ciudades con más okupas de España. El movimiento ha contado siempre con el beneplácito de su alcaldesa Ada Colau que formó parte del mismo antes de llegar al poder. Las okupaciones se han convertido en Barcelona en una auténtico mecanismo de chantajes para sacar la mayor rentabilidad apoyándose en las facilidades de las que disponen quienes las practican para conseguirlo.

Este tipo de acciones ilegales provoca constantes problemas en Barcelona y deja tras de sí múltiples enfrentamientos violentos.