En alguna zona de Castilla se cantaba esta copla el Jueves Santo:

No sé bien si lo sabrás

en la puerta de Barrabás hay un ser humano muerto sin culpa alguna detrás.

Por tus culpas y las mías lo hicieron crucificar.

Pasada está la cuaresma, lejos quedó el carnaval.

Pasémonos por el Huerto con el Nazareno a orar;

y en este tiempo de gracia en conciencia repasar

si no tenemos motivos de quedar sin confesar.

Que a veces la gracia pasa, la gracia que el Padre da,

y seremos responsables si no hay respuesta filial.