En Mozambique se vienen produciendo episodios de violencia terrorista yihadista desde el año 2017, espacialmente en las provincias de Cabo Delgado, Niassa y Nampula. La violencia de esos grupos terroristas ha provocado la muerte de más de 4.000 personas y el desplazamiento de aproximadamente un millón de mozambiqueños, según ACN

En ese contexto, el pasado 12 de febrero tuvo lugar un nuevo ataque terrorista que afectó a la parroquia de Nuestra Señora de África, en la localidad de Mazeze, en la ciudad portuaria de Pemba, capital de la provincia de Cabo Delgado.

La parroquia fue incendiada aunque afortunadamente no hubo fallecidos. El párroco Salvador María Rodrigues de Brito contó a Radio Pax lo sucedido: "Todo fue ametrallado, todo fue arrasado, ni siquiera quedó un solo trozo de ropa”. "Quemaron tiendas de campaña, quemaron casas circundantes, quemaron un automóvil, incluso quemaron el Centro de Salud en Mazeze".

"Lo único que se salvó, gracias a Dios, fue el Santísimo Sacramento y los libros de sacramentos, bautismos y matrimonios, que había traído conmigo, y el Santísimo Sacramento que estaba en la capilla de la sede de la misión, que logré llevar conmigo cuando escapé”, añadió. 

Los terroristas "también atacaron y destruyeron edificios de la misión, especialmente la rectoría, la iglesia y la oficina parroquial, algunos de las cuales fueron construidos recientemente, pero sin víctimas humanas reportadas".