El pasado sábado se celebró una manifestación en Bilbao para pedir el final de la política de dispersión de los presos de ETA, a la que, lógicamente asistieron representantes de EH Bildu, Podemos, ERC, Junts, CUP y BNG, así como de los sindicatos ELA, LAB, UGT, Steilas, ESK, EHNE, Etxalde, Hiru, CNT y CGT. Por su parte, PNV y CCOO se adhirieron a la reclamación, aunque no participaron en la marcha.

MANIFESTACIÓN BILBAO ETA

La ‘manifa’ la convocó la red ciudadana -y abertzale- Sare. Y su portavoz, Joseba Azkarraga, se mostró convencido que la multitudinaria marcha es "la expresión de una parte importante de la sociedad vasca" que pide "el fin de la vulneración de los derechos" de los presos de ETA. "Salimos de una etapa complicada, una larga etapa que hemos ganado después de 34 años. Por fin el alejamiento ha tocado prácticamente a su fin, pero nos queda todavía un largo camino por recorrer, que es la necesidad se traerlos a casa", señaló.

El objetivo se conseguirá, en su opinión, "cuando los jueces y los fiscales dejen de retorcer las leyes" y permitan que se aplique la legislación "ajustándola al momento que vive". "Pero también, que se ajuste de tal forma que la venganza y el odio se destierre para siempre y que la ley se utilice exclusivamente para posibilitar la convivencia en este país”.

Lo curioso es que EH Bildu nunca ha condenado la violencia. Y sus odio sigue vigente en la sociedad vasca, como se puso de manifiesto en el linchamiento a los gráficas civiles de Alsasua.

APOYO ETA

Además, la dispersión prácticamente ha tocado a su fin por el pacto de Pedro Sánchez con EH Bildu, a cambio de sus votos en el Congreso para seguir en el poder.

Por lo que apenas una quincena de reclusos están fuera de las cárceles vascas y navarras, sin contar con la docena que cumplen condena en Francia. Los organizadores celebraron el fin de la política de alejamiento pero denunciaron los bloqueos y retrocesos en los terceros grados, recuerda El Periódico.

Los organizadores celebraron el fin de la política de alejamiento pero denunciaron los bloqueos y retrocesos en los terceros grados

Recientemente, la presidenta de la Asociación Víctimas del Terrorismo (AVT), Maite Araluce, denunciaba en el Parlamento de Navarra los “tiempos difíciles” que están sufriendo las víctimas del terrorismo.

Araluce explicó por qué son “tiempos difíciles” para las víctimas del terrorismo, algo que tiene que ver mucho con las políticas que esta llevando a cabo Pedro Sánchez para mantenerse en el poder con los votos de los antiguos batasunos: “La derogación de la política de dispersión sin exigir un mínimo de arrepentimiento a los presos, el papel protagonista en la política actual, tanto a nivel nacional, como en esta Comunidad, de los sucesores del brazo institucional de ETA y el homenaje prácticamente diario en las calles del País Vasco y Navarra a los terroristas etarras, no ayudan".

Posteriormente, la Presidenta de la AVT lanzó un mensaje a los diputados: "Gestionar el escenario post-ETA es gestionar este sentimiento generalizado que tenemos las víctimas del terrorismo de que ETA ha ganado y de que nuestro sufrimiento ha sido en vano y en balde". Araluce también hizo alusión a un tema de actualidad en la Comunidad Foral: "La retirada de la Guardia Civil de Navarra es una cesión a una reivindicación histórica de ETA, una más, a cambio de mantenerse en el sillón de Moncloa".

Araluce finalizó reconociendo las políticas de memoria y en favor de las víctimas del terrorismo que realiza el Director General de Paz y Convivencia y Derechos Humanos. "Sin embargo", ha admitido "no podemos dejar de reivindicar el aislamiento político de los que no condenan la violencia. Porque no se puede estar con las víctimas, y a la vez pactar con las que defienden el asesinato, la amenaza y la extorsión como método para hacer política. No le demos a ETA por dejar de matar aquello que no consiguieron matando".