Decíamos en Hispanidad que Irene Montero, había encargado, a través de la Secretaría de Estado de igualdad y contra la violencia de género, un informe sobre personas no binarias en España, es decir, aquellos que no se sienten ni hombre ni mujer. En general, las personas consideradas como no binarias se emplazan fuera de los dos sexos al no verse representados por ninguno de ellos. Además, esta característica es independiente de la orientación sexual de cada uno. Es decir, se puede ser no binario y heterosexual o no binario y homosexual o no binario y bisexual, étc…

Pues bien, el "Estudio sobre las necesidades y demandas de las personas no binarias en España" se ha presentado recientemente, rescatando The Objective la información de que la empresa 4Motion Vehicle Consulting SL -dedicada a la «compraventa, importación, exportación y distribución de todo tipo de material relacionado con la automoción»- y contratada 'a dedo' por la ministra no deposita sus cuentas en el Registro Mercantil desde 2020.

En su día, cuando se cuestionó qué relación existía entre una empresa de coches realizara este tipo de informes, Maldita.es sale a escena para explicar el porqué de la decisión de Igualdad. Así, el verificador del que es responsable Clara Jiménez, publicaba en su página web: 

"Nos habéis preguntado por un contrato de la Secretaría de Estado de Igualdad y Contra la Violencia de Género, adjudicado a la empresa 4Motion Vehicle Consulting S.L. por valor de 11.800 euros para llevar a cabo un estudio sobre personas no binarias en España. Los comentarios que acompañan las capturas de pantalla del contrato, disponible en la Plataforma de Contratación, dicen que “es muy raro contratar una empresa de automoción para un estudio sobre identidades de género" o que “el Ministerio de Igualdad ha adjudicado a dedo un contrato a una empresa dedicada a la compraventa, importación, exportación y distribución de material de automoción para elaborar un «Estudio sobre personas no binarias en España»".

El contrato es real, la empresa 4Motion Vehicle Consulting es una asesoría y consultoría en materia de automoción pero tiene un área llamada 4Motion Systemic que se dedica a la investigación, psicología y educación sobre diversidad sexual y de género desde el año 2013. De hecho, 4Motion Systemic ya ha realizado otros estudios sobre personas no binarias en España (personas que no se sienten identificadas ni con el género femenino ni con el masculino).

En Maldita.es nos hemos puesto en contacto con las dos asesorías para saber la relación que tienen entre ellas. El presidente de 4Motion Vehicle Consulting, Jorge López Vela, nos ha confirmado que 4Motion Systemic es “un área o división de la propia consultoría que se creó en 2013 para dar respuesta a temas sociales” y que tienen que ver con “diversidad sexual y de género”. 

Sobre el contrato adjudicado por la Secretaría de Igualdad, López Vela ha explicado que “el nombre de la compañía en el contrato ha inducido a error (...), no hay ninguna entidad social detrás porque 4Motion Systemic es una línea de trabajo de la propia compañía”. Es decir, 4Motion Systemic es una parte de 4Motion Vehicle Consulting que se encarga de los temas que tienen que ver con “terapia, coaching, asesoramiento y formación para añadir cambio efectivo en el desarrollo y evolución”, tal y como se puede leer en su web

La razón por la que 4Motion Vehicle Consulting amplió su área de trabajo en 2013 es porque “en el sector de la automoción trabajamos con procesos, sistemas e informática y nos dimos cuenta que estábamos dejando a las personas de lado”, detalla su presidente. Por eso, “decidimos abrir este canal”, continúa. 

Es como si la General Motors, dentro de su proceso de diversificación, dedicara parte de su plantilla al estudio de la violencia de género o quizás de los nuevos tipos de sexo a añadir al LGTBI+ hasta conseguir los 112 sexos de los que habla la ONU y esos informes los financiara el Departamento de Estado norteamericano como su plan de ayudas al tercer mundo, que anda falto de ideología de género.

Y todo esto lo que ratifica, de nuevo, es que los verificadores no persiguen el bulo -aquí no hay bulo y ellos mismos lo reconocen- sino que persiguen aquellas opiniones, planteamientos o análisis, que no les gustan. Los verificadores son instrumentos muy eficaces a la hora de imponer el pensamiento único.