
Las diferencias entre el cardenal-arzobispo de Madrid, José Cobo (imagen izquierda) y el nuncio del Vaticano en España, Bernardito Auza, tampoco ayudan a Cuelgamuros
Casi siempre hemos aplaudido en Hispanidad la campañas de HazteOir: son los mejores agitadores católicos que conozco y en la sociedad de la información cuantos más activistas, mejor. Sé que lo malo de Hazteoir es que siempre pretende colocarse a la cabeza de la manifestación y también es malo su carácter secreto, pero dejemos eso ahora. Hágase el milagro y hágalo el diablo: sea bienvenida la campaña de HazteOir contra el asalto del Sanchismo al Valle de los Caídos: pretenden desacralizar la basílica, expulsar a los benedictinos, profanar el cementerio católico y convertir el complejo en un parque temático hortera, quizás para ganar la guerra que perdieron en 1939 y, así, convertir a los asesinos en víctimas y a las víctimas en asesinos.
La obsesión de Moncloa era la cruz del Valle pero es difícil destruirla y, en cualquier caso, no se atreven a destruir la cruz cristiana más grande del mundo. Quedarían como los talibanes afganos que destruyeron monumentos históricos.
Todo ello, por cierto, para fomentar el guerracivilismo del Frente Popular sanchista: socialistas, comunistas y separatistas. Ese guerracivilismo , consistente en que todo aquel que discrepe del Sanchismo es un ultra y este es el silogismo que mantiene a Pedro Sánchez en el poder.
Por tanto, apoyemos la campaña de firmas de HazteOir, que pide al Papa Francisco que detenga a Sánchez: Pinchar aquí.
Las diferencias entre el arzobispo de Madrid y el nuncio del Vaticano en España, Bernardito Auza, tampoco ayudan a Cuelgamuros
Ahora bien, una precisión: no sé si es el Papa quien, en este caso, debe echarle un pulso a Moncloa. Sí, el Vaticano debería hablar pero los obispos españoles también deberían plantarse ante la nueva profanación del profanador Sánchez. El silencio de nuestros prelados empieza a molestar.
Y por cierto, las diferencias entre el cardenal-arzobispo de Madrid y el nuncio del Vaticano en España, Bernardito Auza, tampoco ayudan a Cuelgamuros. Recuerden que es José Cobo quien llevaba hasta ahora las negociaciones con el Gobierno socio-podemita sobre el valle con el ministro más mentiroso de todo el Ejecutivo: Félix Bolaños. Porque las maniobras del dúo Pedro Sánchez-Angel Víctor Torres, su ministro de logia, empiezan a resultar algo más que preocupantes: Huelen a azufre que apestan.
Sí la Iglesia y los católicos debemos oponernos a la profanación del Valle de los Caídos, Pero, en primera línea, los obispos españoles, que son los garantes de los acuerdos Iglesia-Estado. Si profanan la basílica del Valle, ¿por qué no van a profanar cualquier templo católico? Acabarán profanando la catedral de Burgos. Recuerden que ya lo intentaron con las inmatriculaciones.
Los católicos debemos echarnos a la calle, también porque España se encamina desde el enfrentamiento civil a la guerra civil.
Por cierto, a lo mejor es el momento de releer la entrevista que Hispanidad le hizo al arzobispo de Madrid.