Hoy mismo les contamos en Hispanidad que, a consecuencia de la sentencia del Tribunal Supremo británico, la Federación Británica de Judo ha actualizado su política sobre participación de personas trans y primará el sexo con el que se nace. 

Sin embargo, Escocia se ha mantenido reticente a adoptar medidas en consecuencia. El último ejemplo lo vimos con la petición de la Inspección de Prisiones de Escocia: pelucas, ropa interior y embajadores de igualdad y diversidad para ayudar a los reclusos trans.

O con las denuncias de la propia J.K. Rowling, autora de 'Harry Potter', que señalaba directamente a la Ley de Delitos de Odio que se va a aprobar en Escocia. 

Pero 'a la fuerza ahorcan', y el Gobierno de Escocia ha tenido que anunciar una nueva guía en la que las escuelas deben ofrecer baños separados para niñas y niños: las instalaciones deben estar disponibles en función del sexo biológico. Aunque, las escuelas también pueden proporcionar baños neutrales en cuanto al género, es decir, mixtos.

La nueva guía dice que es importante apoyar y escuchar a los jóvenes que dicen que «quieren vivir como un niño aunque su sexo biológico sea femenino, o ahora quieren vivir como una niña, aunque su sexo biológico sea masculino».

La ministra de Educación Gilruth dijo a BBC Scotland News que el fallo de la Corte Suprema fue «muy claro» en relación al sexo biológico y que la guía había sido actualizada para reflejarlo.